“Para que los participantes sean profesionales habrá reglas de disciplina y con ello le diremos no a las drogas y sí al deporte, para que los que estén inscritos puedan distraerse mientras aprenden a torear”, afirmó Fernández.
Los artífices del proyecto señalan que la escuela taurina funcionará en la plaza de toros El Diamante, inmueble municipal ubicado a un costado de los Bomberos Municipales de Cuyotenango.
Fuentes, conocido como el Diamante Cuyoteco, sostiene que para ellos es un honor brindar los conocimientos de manera gratuita a quienes se interesen en llegar, ya que él aprendió esta labor en el ruedo con toreros, y por ello busca, junto con sus compañeros, aportar su conocimientos sin egoísmo.
Otra de las intenciones es impulsar el nombre de Cuyotenango, pues Arturo Fernández, uno de los instructores, brilló en plazas del exterior, donde demostró su destreza, agregó Fuentes, por lo que desea que su pueblo brille.
Los responsables del proyecto añadieron que parte del pénsum de la academia será enseñarles a montar, floreo de soga y canto, con la intención de que la actividad sea un atractivo en el futuro.
El grupo de instructores agregó que un torero tiende a sufrir lesiones en la cara, los muslos, la espalda, el abdomen y hasta en el corazón, por lo que enseñarán como lidiar un toro, banderillar, matar, y cómo protegerse.