Desde joven ha trabajado por el bienestar de sus paisanos. Ver a niños de extrema pobreza con un futuro incierto en las remotas aldeas de San Marcos y Quetzaltenango, lo motivaron a gestionar la construcción de una escuela de la comunidad de Los Pérez Chanchil.
Actualmente colabora con la Casa de la Cultura Sampedrana en el proyecto de la escuela de marimba. Pero lo que más satisfacción le da es saber que su libro Lecciones de vida en primera persona sirve de motivación para que niños y adultos sigan estudiando.
“Es la educación el camino seguro que puede ayudarnos a incursionar en otros campos, sin importar nuestro origen. Se requiere perseverancia, apoyo al estudiante dentro y fuera del aula y creer en uno mismo. No se trata de hacer cosas extraordinarias, sino hacer lo mejor cada día”, expresa Edmín López, cuyo libro es texto de lectura en algunas escuelas de San Marcos.
Entre otros proyectos futuros, López espera contar con un albergue en San Pedro Sacatepéquez para niños de su aldea y que tengan la escuela a la mano.
Maestros y profesionales de San Marcos elogian el altruismo de López, quien de campesino dio el salto a ingeniero que trabaja fuera de Guatemala, pero no por ello se ha olvidado de su tierra y de sus paisanos. El duro camino que ha recorrido marcó su vida y ahora le tiende la mano a las personas.