La Ley Antievasión II (decreto 4-2012) permite ahora que el ente recaudador pueda diseñar y enviar a imprimir los timbres a entes nacionales o extranjeros y adaptarlos a nuevas técnicas de producción.
Este año, aunque la SAT cambió el diseño, el impresor será el mismo, el Taller Nacional de Aceros y Grabados del Ministerio de Finanzas, con el cual se tiene un convenio.
Entre los 14.4 millones de timbres se incluyen diferentes denominaciones desde los Q0.50 hasta los Q100.
Se agregaron características de seguridad, en la parte inferior, como la impresión de un código de barras, el cual representa en cada timbre el número correlativo de fábrica, refirió la SAT.
También se implementó un holograma tridimensional visible y estampado mediante un sistema de impresión por transferencia de calor y presión con letras, así como el logo de la SAT. El nuevo timbre no es fotocopiable y es antiescáner a color.
También se elimina el perforado de la parte principal y el talón —será un solo cuerpo—.
Los cambios se realizan para dar certeza de la autenticidad de los timbres fiscales que se utilizan en documentos públicos y privados, y así evitar las falsificaciones.
El costo de cada unidad subió tres centavos, de un promedio de Q0.21 por timbre a Q0.24. El monto invertido para el 2013 fue de Q2.8 millones y el previsto para el 2014 es de Q3.4 millones.
Estas son las herramientas, por medio de las cuales se paga el impuesto sobre timbres fiscales y papel sellado. A noviembre del 2012, los ingresos por ese impuesto fueron de Q739.7 millones y al mismo plazo del 2013 se han recaudado Q407.9 millones, una baja de Q331.8 millones (-44%).
Por denominación
Denominaciones de los timbres: Q0.50, Q1, Q2, Q5, Q10, Q25 y Q100.
Se usan para contratos civiles y mercantiles, documentos otorgados en el extranjero que tengan efectos en el país.
Pagos emitidos por las aseguradoras o afianzadoras, por primas pagadas o pagos de fianzas.
Pagos de premios de loterías, rifas y sorteos.
Pago por retiro de fondos de empresas o negocios, para gastos personales o por viáticos no comprobables.
Los documentos que respalden los pagos de dividendos.
Documentos que acreditan comisiones que pague el Estado por recaudación de impuestos, compras de especies fiscales y otros.
Q3.4 millones es el costo de emisión de los timbres fiscales para el 2014.