“No tenemos palabras para agradecer a la familia Barillas Menocal, por el aporte que nos han traído”, expresó.
“Desde hace cuatro meses se comunicaron con nosotros, luego de que en una nota publicada en Prensa Libre informamos sobre las condiciones en las que recibían clases los niños”, agregó De León.
Un integrante de la familia donante indicó: “Dios ha gobernado nuestro hogar y hoy estamos dando un poco de las muchas bendiciones que hemos recibido de Él. La alegría más grande para nosotros es ver que los pequeños ahora contarán con un escritorio digno”.