El inmueble más dañado alberga oficinas privadas, pero colapsó toda la parte de atrás, y el de a la par perdió al menos dos cuartos y varias paredes quedaron “en el aire”.
El hecho ocurrió en la 16 calle final, entre 3a. y 4a. avenidas, zona 2, en el interior de la finca El Zapote.
García explicó que hoy continuará la evaluación general para determinar, con la ayuda de un geólogo, qué fue exactamente lo que produjo el derrumbe. Adelantó que se pudo haber debido a que en esa colonia no hay sistema de drenaje.
Una de las vecinas afectadas, Natalia Leiva, expresó que alquilaba la casa donde residía, y fue su hija la que le avisó de los retumbos.