“Nosotros ponemos el medio y la población aporta los regalos. En esta ocasión recolectamos cerca de mil juguetes, que compartimos con niños de Cimientos Cala, que es una de las comunidades más lejanas, pues está a 64 kilómetros del área urbana”, expresó.
Oswaldo Gómez, quien tiene a cargo un programa de música ranchera, comentó que desde hace tres años ha acompañado esta actividad que lo deja satisfecho porque no hay mejor regalo que ver sonreír a un niño.