Vida

Sáquele el jugo

Para aprovechar al máximo las vitaminas y fibra que contiene la naranja, consúmala entera.

La piel blanca que recubre toda la naranja cuando se quita la cáscara es fuente importante de fibra insoluble. “Esta última ayuda a que el azúcar pase a la sangre despacio y no de golpe”, indica la licenciada Julieta Salazar de Ariza, catedrática de la Escuela de Nutrición de la Universidad de San Carlos. Además la fibra, mantiene una función intestinal normal, evita el estreñimiento y reduce los niveles de colesterol en la sangre.

Jugosa

La naranja es importante por su alto contenido de agua (jugo), la que tiene vitaminas hidrosolubles, como la vitamina C. Según el Instituto de Nutrición de Centroamérica y Panamá, INCAP, la vitamina C ayuda a cicatrizar heridas y a absorber mejor el hierro de los vegetales de hojas verdes que se consumen.

Anne Bonin, subdirectora de la Clínica Biológica Hunab-Ku, indica que la naranja contiene carotenos, fuente de vitamina A, necesaria para el proceso de la visión. También tiene pectina, que ayuda a digerir mejor los alimentos. Aporta potasio, necesario para regular el balance de electrolitos y de agua en las células del cuerpo.

Asimismo, la naranja tiene vitaminas del complejo B, que contribuyen a mantener un sistema inmune sano; zinc, importante para la piel; fósforo, ideal para fortalecer la función del cerebro; azúcar natural, y bioflavonoides, (vitamina P) que retiene la vitamina C, para aprovecharla.

Dulces o agrias

El ingeniero Francisco Vásquez, catedrático de la Facultad de Agronomía, de la USAC, indica que las naranjas pertenecen a la familia de las Rutaceas, y son del género citrus, el que incluye al limón, mandarina, pomelo y toronja.

Sin embargo, estos frutos no son nativos de Guatemala, sino que fueron traídos después de la conquista. Las variedades más importantes de naranja son: la dulce, Citrus sinensis, y la agria o ácida, Citrus aurantiun. Los árboles pueden producir de dos mil a tres mil frutos en cada cosecha.

En Guatemala las zonas productoras son: Salamá, Cobán, Suchitepéquez, Jutiapa, Chiquimula, Izabal, y San Marcos.

Medicinal

El jugo de naranja es un gran desinfectante y estimula los jugos pancreáticos; es anticancerígeno; favorece al sistema nervioso, disminuye el riesgo de padecer “gota”, insomnio, enfermedades de la próstata, ovarios, matriz, tuberculosis, cálculos biliares, obesidad, calambres, dolor de cabeza, enfermedades del corazón, entre otras, señala Anne Bonin.

Revitalizador

Esta preparación tiene propiedades medicinales, mejora el sistema inmune y actúa como antiviral.

Los ingredientes son: 1/4 de piña; 1 naranja (pelada, con el bagazo blanco); 1/2 taza de fresas y 1 banano pelado.

Procedimiento

Saque el jugo de las tres primeras frutas en el extractor y luego licue todo con el banano.

En el caso de la naranja, es importante no sólo sacarle el jugo, sino extraerle los nutrientes.

Para ello, pele y deje la cáscara interna blanca y sus membranas.

Colóquela en el extractor y obtenga una bebida espesa y espumosa de color cremoso.

Este es el equilibrio perfecto para que los nutrientes de la naranja cumplan con su función vitalizadora.

Consejos

-Las naranjas deben comerse inmediatamente después de pelarlas y cortarles, ya que la vitamina C se destruye al ponerse en contacto con el aire.

-Al comprarlas, prefiera las de cáscara brillante y color intenso.

-Disfrútelas crudas, porque la cocción disminuye el contenido de vitamina C y de fibra.

Tipos de naranjas

Naranjas agrias: utilizadas para hacer naranjada y ablandar carne.

Naranjas dulces: sirven para jugo, mermeladas, y para disfrutarlas frescas y completas.

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