La potente explosión se registró en la zona de Ainkaua, donde se elevaron grandes columnas de humo.
El atentado ocurrió luego que las autoridades iraquíes dijeron creer que las fuerzas del gobierno mataron horas antes al antiguo lugarteniente de Saddam Hussein, Izzat Ibrahim al-Douri, quien era un fugitivo buscado desde la invasión encabezada por Estados Unidos en 2003 y que posteriormente se alió con milicianos del grupo Estado Islámico.
No hubo información oficial inmediata sobre víctimas del carrobomba, pero un funcionario estadounidense dijo que ningún empleado consular ni guardias resultaron muertos o heridos por el atentado.