¿Cómo está el panorama político, a tres días de la convocatoria?
Morales: En la manifestación pacífica del sábado se mostró el cansancio de la población hacia la clase política y el sistema. Hay una crisis institucional y el Tribunal Supremo Electoral tiene que ser el ente que sostenga la credibilidad institucional.
¿La coyuntura nacional tiene consecuencias para los partidos políticos?
Cruz: Los partidos políticos tienen la responsabilidad de tomar en cuenta el mensaje de la ciudadanía. No se pueden quedar con canciones, fotos y mensajes cortos. La población exige más que frases y eslóganes, exige que se hable sobre cómo se va a combatir la corrupción y sobre canales para promover la transparencia.
¿El movimiento social podría traer un nuevo candidato?
Cruz: Es importante que exista liderazgo que lleve el rumbo hacia donde debe ir la ciudadanía. La población guatemalteca exige que tengamos a alguien a quien seguir, es importante que el rumbo que tomen las manifestaciones lleve una dirección a algo concreto.
Morales: El panorama político es incierto; la voluntad del electorado no está decidida. Más que un candidato, se replantea a los partidos sus estrategias para informar sus planes de gobierno y que dentro de la agenda de trabajo tenga la transparencia. La ciudadanía va a estar atenta a casos de corrupción.
¿Cómo será la campaña? ¿Violenta? ¿Con ilegalidades?
Morales: El sistema de partidos políticos está debilitado por esas acciones y el TSE debe tomar una actitud activa. Ya lo ha hecho para hacer valer su papel de Supremo, para frenar la campaña y que esta se lleve de forma igualitaria, frenar las campañas negras y devolver la credibilidad al sistema.
¿El Tribunal es realmente supremo y ha sido contundente?
Cruz: Este TSE marca una diferencia: nada contra la corriente, actúa dentro del margen que le permite la Ley Electoral y de Partidos Políticos y el Reglamento. Es importante que la ciudadanía se convierta en vigilante y garante, que acompañe el proceso electoral.
¿Los cambios que hagan los partidos políticos les devolverán la credibilidad?
Morales: Posterior al proceso, el TSE debe liderar un planteamiento de reformas a la Ley Electoral. El tema de financiamiento es impostergable debatirlo y reformarlo.
¿Qué tiene este proceso que sea diferente al del 2011?
Morales: El del 2011 se caracterizó por ser un proceso muy conflictivo, y ahora un estudio de Cultura Política dice que Guatemala ocupa el último puesto en el nivel de tolerancia, con un 29% en toda América Latina. Solicitamos que haya coordinación permanente e interinstitucional entre el TSE y el Ministerio de Gobernación.
Cruz. Las estrategias deben ir en función de la prevención para ayudar a tener un mejor proceso electoral. Los candidatos tienen la responsabilidad sobre sus seguidores.
¿Se puede confiar en el Ministerio de Gobernación para prevenir esa violencia?
Cruz: Es la institución que constitucionalmente le debe proveer seguridad a los guatemaltecos y es una garantía que los ciudadanos debemos exigir.
Hubo un pacto de no agresión entre partidos políticos, pero no todos lo firmaron.
Morales: La ciudadanía debe exigir a los partidos políticos y a los candidatos que se abstengan de realizar actos que atentan contra la voluntad ciudadana, y eso parte por respetar una campaña igualitaria.
¿Es suficiente un pacto de no agresión?
Cruz: Es un acto simbólico en el que los partidos se comprometen a tener un proceso sin violencia y sin agresiones.
Morales: También es una garantía que los ciudadanos debemos dar; hay espacios en donde podemos participar y ser garantes de que se cumpla.
¿Qué debilidades tiene el TSE?
Morales: Se amparan en que no tienen recursos, pero deben buscar colaboración de la sociedad civil, que pueda ayudar en tareas como empadronamiento y brindar apoyo en la certeza del proceso.
Cruz: La capacidad que tenga el Tribunal para controlar el acarreo de votantes el día de las elecciones.