De su lado, quienes no fueron de la partida en la semifinal realizaron trabajos tácticos con los sparrings de la selección juvenil Sub-17.
El defensor Ezequiel Garay, que no pudo jugar ante Paraguay por sufrir una gastroenteritis, no estuvo presente en el entrenamiento.
El plantel argentino viajaba por la tarde a Santiago para instalarse en el hotel Inercontinental a la espera de la final contra Chile el sábado en el estadio Nacional.
Argentina quedó a un paso de su misión en Chile: poner fin a la sequía de 22 años sin títulos internacionales, desde la Copa América de Ecuador-1993, y borrar la amargura de la final del Mundial de Brasil-2014 perdida contra Alemania.
La Selección de Argentina trabajó por última vez en Concepción antes de viajar a Santiago. (Foto Prensa Libre: AFP)