En esos momentos, Valverde tenía 18 años, aunque el investigador musical Igor de Gandarias identifica la composición con el sismo del 25 de diciembre de 1917 y sus réplicas.
El cronista Francisco Cajas Ovando evoca la escena del músico caminando por las calles quetzaltecas llenas de escombros.
La romántica versión tiene sentido, pues el 22 de abril hubo luna llena, pero resulta que también el 28 de diciembre de 1917 hubo fase total. En todo caso, al escuchar la obra en verdad se conjugan tristeza y esperanza, angustia y virtuosismo musical.
El autor
Mariano Valverde nació en Quetzaltenango el 20 de noviembre de 1884. Hijo de Mariano Valverde Álvarez y Sofía Ortega. Fue bautizado por el sacerdote Manuel González, en la Iglesia del Espíritu Santo.
Estudió en el Instituto Nacional para Varones de Occidente, donde recibió clases particulares de música, y prosiguió en el Conservatorio Nacional de Música. Pertenece a la familia de músicos de Javier y Simón Valverde. Su hermana menor fue soprano.
Fue integrante de la marimba Hurtado Hermanos, y con este conjunto viajó y grabó en Estados Unidos la mayor parte de su repertorio, a principios del siglo XX.
Compuso más de 200 piezas, entre las cuales destacan: Horas grises, Último amor, Ondas azules, Reír llorando, Bajo los árboles, Siempreviva, Madreselva, Heliotropo y La ciudad de las cumbres.
Con la marimba cromática ideada por Hurtado y Paniagua, Valverde encontró nuevas posibilidades melódicas, su formación académica le llevó a impulsar la interpretación mediante partituras y no solo al oído.
Mariano Valverde murió en la Ciudad de Guatemala el 26 de diciembre de 1956, según Francisco Cajas Ovando. Fuentes: Diccionario biográfico de Guatemala. Creación musical en Guatemala, de Dieter Lehnhoff. / La música en Guatemala, de J. Eduardo Tánchez. / Luis Escobar.
Escuche la pieza Noche de luna entre ruinas.