Agregó que en las referidas comunidades 50 viviendas quedaron con daños en el techo o paredes. “No hubo daños personales, pero si pérdida de electrodomésticos”, expresó.
Dijo que pidieron el apoyo de otras instituciones para que los ayuden con madera y lámina para ayudar a los damnificados.
Afirmó que coordinarán con el Ministerio de Salud para que verifique que los afectados no padezcan enfermedades gastrointestinales o en la piel.
Esteban López, vecino de la aldea Trancas I, manifestó que el fuerte viento los asustó y que en su vivienda la lluvia alcanzó los 50 centímetros de altura.
Raúl Tobar, de los Bomberos Voluntarios, informó que en la carretera hacia la aldea Jícaro Grande, en la cabecera, dos árboles fueron derribados por el viento, lo que afectó el tránsito.