Uno de ellos es Jaime Jaramillo Hernández, de 49 años, a quien las autoridades acusaron de ser el líder de la red que transportaba a unos 150 migrantes procedentes de México y Centroamérica a la semana. Los inmigrantes pagaban cerca de US$5 mil por el viaje.
“Estos arrestos son un golpe significativo a una organización de tráfico de personas multimillonaria que ha demostrado tener poco respeto hacia la vida humana”, dijo Spero.
La investigación de dos años llevó al arresto de más de 400 personas, más de 60 acusaciones y la incautación de cerca de US$187 mil, indicaron las autoridades.
La red se extendía desde las ciudades fronterizas del oeste a lugares como San Antonio y Dallas.Harry Jiménez, un subagente especial de Investigaciones de Seguridad Nacional, dijo que los detectives estudian la posibilidad de que la red haya tenido vínculos con carteles mexicanos, pero por el momento nada ha surgido.
“Hay una buena posibilidad de que a medida que avancemos se vuelva más claro quién estaba tras esto en el lado mexicano”, dijo.
Una de las formas en las que los inmigrantes eran transportados era dentro de un camión de mudanzas de la compañía U-Haul cuyo chofer intentaba evitar a las autoridades al girar sobre unas vías de tren. Muchos inmigrantes también se amontonaban adentro de los conductos de flujo de aire de camiones con remolque.
Los inmigrantes han resbalado y caído a su muerte cuando son golpeados por el camión o por algún vehículo del tránsito que viene en el sentido opuesto, dijo Jiménez, al explicar que “tienen que colgarse ahí por su querida vida” .
Aquellos acusados de tráfico de personas se enfrentan a 10 años en prisión, si son declarados culpables, dijo Richard Durbin, el fiscal del Distrito Occidental de Texas.
Indicó que la cantidad de dinero cobrada por los traficantes y el riesgo creciente que los inmigrantes están dispuestos a enfrentar es evidencia de que se vuelve más difícil cruzar la frontera sin autorización. “No es una frontera porosa que la gente simplemente va a cruzar”, dijo. “Si la entrada fuera sencilla, no sería necesario exponer a la gente a los peligros”.