“Los resultados han superado nuestras expectativas, afirmó el presidente del recinto ferial de Colonia, Gerald Böse.
El encuentro, que atrajo a unas 800 empresas de más de 40 países, estuvo centrado en esta edición en la presentación de nuevas secuelas para juegos clásicos, así como la puesta de largo de varios accesorios, entre los que dominaron las gafas de realidad virtual.
En la feria destacó la presentación de una serie de nuevos juegos para la Xbox One de Microsoft y la Play Station 4 de Sony, bazas que buscan explotar al máximo las capacidades de estas consolas, que ya llevan año y medio en el mercado.
Los gamers visitan en stand de Callo of Duty, durante la Gamescom (Foto Prensa Libre: EFE).
El gigante estadounidense de la informática presentó en la Gamescom los títulos Scalebound, Quantum Break, Crackdown 3, la tercera temporada de Killer Instinct y The Rise of the Tomb Raider, aunque la mayoría no se comercializarán hasta el 2016.
Microsoft avanzó asimismo que su nuevo sistema operativo, el Windows 10, estará a partir de noviembre disponible para la Xbox One, lo que seguirá difuminando las fronteras entre los videojuegos para ordenador y para consola.
Sony mostró por su parte la nueva versión de sus gafas de realidad virtual, llamadas Morpheus.
La feria sirvió además de escenario para la presentación de un estudio de perspectivas que apunta que la industria de los videojuegos crecerá este año a nivel global por encima del 10 por ciento.
El país invitado en esta edición fue Reino Unido, que cuenta con un importante sector económico dedicado a los videojuegos.