Con los resultados obtenidos, todo apunta a que las variables que miden la economía se mantendrán en el ritmo esperado para los próximos meses.
Pese a la crisis política que se vivió en las dos últimas semanas, pero que se extendió por seis meses, la economía —medida por el producto interno bruto (PIB)— no se ha visto impactada, aseguró a Prensa Libre Sergio Recinos, presidente en funciones del Banco de Guatemala (Banguat) y la Junta Monetaria (JM), según evaluaciones hechas por esas instituciones.
“El desarrollo de las elecciones generales aclara el panorama político. Consideramos que se pueda revertir la tendencia del índice de confianza que venía acumulándose en los últimos seis meses”, expuso.
El funcionario destacó que luego del desarrollo de la primera vuelta, las expectativas para los agentes económicos han mejorado para ejecutar sus decisiones de inversión gracias al clima de negocios imperante.
No obstante, la mayoría de guatemaltecos aseguró, en la Encuesta Libre, que la falta de ingresos financieros personales sigue siendo el principal problema que aqueja a nueve de cada 10 ciudadanos.
El problema se agudiza más en el área rural y zonas urbanas de la provincia, no así en la capital, en la cual la percepción de bienestar de los ciudadanos es relativamente mejor.
Corto plazo
La revisión más reciente que hizo la JM sobre del desempeño de la economía —medida por el PIB— es que el indicador crecerá en un rango de entre 3.6% y 4.2% este año.
El último referente sobre el desempeño de la actividad productiva fue el índice mensual de la actividad económica (IMAE), que a julio se ubicó en 3.6%.
El IMAE es un indicador que mide las variaciones reales de la producción. Su función es seguir el comportamiento de la economía de forma mensual.
Según Recinos, el IMAE mostró un desempeño acorde con lo proyectado en la política económica.
La inflación —índice generalizado de precios en la economía— se situó en julio último en 2.32%, dentro de la meta establecida por las autoridades. Sin embargo, el costo de la canasta básica de alimentos se mantuvo en alza durante los primeros siete meses del año.
El presidente de la banca central resaltó que la baja del precio internacional del barril de petróleo y sus derivados y de otras materias primas, así como la estabilidad del tipo de cambio, son algunos factores que explican el comportamiento del indicador.
Además, según análisis del Ministerio de Agricultura, se proyecta una producción agrícola normal, ya que las incidencias de la variación climática se enfocarán en determinadas regiones del país.
Otros indicadores que muestran un desempeño favorable son las exportaciones, el tipo de cambio, el crédito del sector bancario, la inversión y el envío de remesas familiares.
Vuelve la calma
El desarrollo de las elecciones generales liberará la tensión que se venía acumulando en los últimos meses para los agentes económicos, aseguró el economista independiente Juan Alberto González.
El experto subrayó que, a mediano plazo, las elecciones oxigenarán la coyuntura política, porque se interpreta como una salida normal a los conflictos que se desataron desde abril último y que provocaron la renuncia de Otto Pérez Molina la semana pasada.
“Las elecciones son una señal de madurez que a mediano plazo será el resultado una salida espontánea y ofrecerá un respiro para los tomadores de decisiones”, enfatizó González.
El economista manifestó que a mediano plazo existen variables que pueden generar inestabilidad y que responden de manera primaria a los acontecimientos políticos.
En este caso, indicó que el reflejo inmediato de este proceso se podrá ver en el flujo de inversión extranjera directa (IED), en lo que coincidió el presidente del Banguat. Ambos creen que podría haber impacto por ingreso de capitales frescos el próximo año.
Según datos del Banguat, durante el primer trimestre del año, Guatemala captó US$301.8 millones —Q2 mil 338.9 millones— en IED.
Para este año se pronostica un incremento del flujo de los capitales de 8% respecto del 2014, y cerrar en US$1 mil 447.2 millones.
Prioridades
Raúl del Valle, experto en temas económicos, afirmó que en el campo económico se deben trabajar varias áreas que han quedado impactadas por la situación política y la imagen del país en el exterior.
En primer lugar, resaltó, está la atracción de flujos de IED, así como capitales nuevos locales, en una expansión en el ofrecimiento de incentivos no fiscales de nueva generación, como los aplican otros países.
En ese aspecto sobresale una intensa promoción para atraer capitales en las áreas de industria ligera, alimentos y servicios.
El especialista pidió que el Ministerio de Economía (Mineco) retome un rol más preponderante de sus funciones.
“En los últimos tres años y medio, el Mineco no tuvo mayor acción de trabajo y, en general, así fue el Gabinete Económico”, destacó.
Del Valle agregó que se deberá resolver el planteamiento de los salarios diferenciados que se promovió en cuatro municipios del país durante la administración de Pérez Molina.
Otros aspectos que quedan pendientes de resolverse están en el área de política fiscal, ya que durante los primeros siete meses del año la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) no alcanzó las metas de recaudación fiscal y mantiene una brecha superior a los Q2 mil millones.
Además, al término de la actual legislatura deberá debatirse el proyecto del presupuesto de ingresos y egresos del Estado por Q72 mil 430 millones.