HAGAMOS LA DIFERENCIA
Encuestas
Este domingo el pueblo de Guatemala acudió a las urnas en forma masiva, dispuesto a cambiar los destinos de la Nación. En una votación atípica por los últimos acontecimientos, el área urbana ejerció su antivoto y colocó en primer lugar a Jimmy Morales, quien deberá pelear en segunda ronda el puesto de presidente. Al momento de escribir este artículo, en cerrada pelea por el segundo lugar, Sandra Torres lo ocupaba por escasos votos, con 19.48%. Fue indignante ver cómo Líder y UNE acudieron a estrategias como la compra de votos, acarreo de personas, entregas de vales, comidas, etc., para asegurarse los votos.
Se confirmaron los resultados de Encuesta Libre, que el jueves 3 de septiembre publicaba un cerrado empate por el primer lugar entre Jimmy Morales, con el 25%, Manuel Baldizón, con el 22.9%, y Sandra Torres, con 18.4%. La encuesta mostraba “que las preferencias cambiaron por la situación que vive el país ante los constantes casos de corrupción revelados por investigaciones. Esa situación provocó una caída de Baldizón y un aumento para Morales, quien nunca había participado en política”.
A pesar de la situación del país: que estrenaba presidente, sin vicepresidente, su expresidente y exvicepresidenta tras las rejas, con una campaña negra exacerbada que circuló en los días previos a las elecciones por distintos medios, los datos de las encuestas, al compararlos contra los reales, fueron parecidos, manteniéndose dentro del margen de error del 2.7% con el que fue diseñada la muestra, con leve diferencia en el caso de Baldizón, de quien se evidenciaba tendencia a la baja al observar las encuestas anteriores. Hay que reconocer que la clave para que se dé este tipo de resultados es la forma en que la muestra es escogida. El muestreo se aplicó en diseño polietápico, el cual garantizaba la representatividad de las regiones, departamentos, área rural y urbana, estratos sociales, etnias, etc. Sin embargo, las encuestas son desprestigiadas, debido a que cada partido saca su propia encuesta, y las manipulan para aparecer en lugares preferentes dentro de las mismas, apelando a la idiosincrasia de que la gente siempre prefiere unirse al ganador.
Como guatemaltecos, tenemos muchas dudas sobre Ji-mmy Morales, pero no cabe duda de que es opción diferente. En familia vimos el día de las elecciones la película Un presidente de a sombrero, donde se refleja mucho de la realidad nacional; ojalá que el mensaje final sea aplicado a su vida por el bien de la Nación, y que, como dijo en entrevista concedida como candidato ganador, prefiera ser “payaso independiente” y no “títere” de los poderes paralelos de esta nación al conformar un gabinete con ministros conocedores del tema, honrados y trabajadores.
De algo estamos seguros, Dios está respondiendo a esta nación. A la par de la campaña electoral han existido campañas de oración, de reflexión y de manifestación de sus habitantes; se han doblado rodillas, se ha clamado, y la respuesta de quien será el próximo presidente no necesariamente será en quien nosotros pensábamos. Se está confirmando el primer rótulo de la publicidad que vi de Jimmy Morales, “La fe mueve montañas”, ante el cual no deje de sonreír, pero diciendo “todo es posible, si puedes creer”.
samreygo@yahoo.com