El hombre estaba armado, pero no le disparó al equipo SWATT, dijo Hernández.
Al menos cuatro personas habían sido retenidas contra su voluntad dentro del restaurante Chris’ and Pitt’s en Downey, dijo Hernández.
Aproximadamente una hora antes de que los agentes irrumpieran en el restaurante, se vio a decenas de personas, incluso niños, saliendo rápidamente del lugar cuando el hombre entró. El hombre hizo dos disparos al aire antes de entrar corriendo.
“Estábamos cenando y oí a un hombre gritar íAl suelo! íAl suelo!” ’, dijo Stella Aguilera, jadeando y al borde del llanto, en declaraciones a la televisora KCAL-TV. “Mi hija estaba en el baño con mi nietecita de dos años.
Todos nos echamos al suelo y yo agarré a mi nieto y vi al hombre con la pistola. Él decía: Necesito medicina, que alguien me dé medicina” ’.
Aguilera dijo que el hombre entonces gritó que todas las mujeres y niños podían irse, así que ella y sus nietos salieron corriendo.
La Policía no reveló el nombre del pistolero.
La persecución comenzó cuando un helicóptero del departamento del alguacil detectó una señal de un Honda Civic robado en el área de Whittier, dijo el comandante Mike Parker. El personal del helicóptero entonces vio al hombre robar otro auto a punta de pistola.
Vehículos policiales y de la Patrulla de Caminos de California persiguieron al hombre a altas velocidades por calles marginales y la carretera Interestatal 710 a través de varias comunidades del Este de Los Angeles, dijo Parker. Hubo al menos una colisión.
Al final, un vehículo de la patrulla de caminos forzó al hombre a frenar usando una maniobra. Tras unos momentos, el hombre salió del auto y corrió hacia el restaurante.
Al menos una persona fue vista esposada en las afueras del restaurante durante el incidente, pero Parker dijo que fue solamente como precaución hasta que pudiesen determinar con certeza quién era el hombre armado.
“Fue una noche muy peligrosa” , dijo Parker, “para los agentes del orden y para la gente” .