Las dos mujeres, que son familiares, no tardaron en llegar a las manos, pese a los esfuerzos de los transeúntes para separarlas.
Cuando la amante señaló con el dedo hacia la esposa traicionada, esta última se apresuró a morderlo, con tal fuerza que se lo arrancó de un tajo.
La herida fue rápidamente trasladada a un hospital y el dedo fue recuperado por la policía para intentar una cirugía reconstructiva.
Según un portavoz de la policía contactado por la agencia AFP, los médicos no pudieron coser el dedo.
“Estamos acostumbrados a ver escenas de la calle de este tipo, donde las mujeres pelean con pasión, pero nunca con tanta violencia”, comentó sorprendido el vocero de la policía.