Justicia

Las contradicciones del último testigo que declaró en el juicio del caso Botín en el Registro de la Propiedad

Después de un año, ocho meses, 16 días y 98 audiencias, el Tribunal Décimo Tercero Penal escuchó al último testigo en el debate del caso Botín en el Registro de la Propiedad, que tiene en el banquillo a Samuel Morales Cabrera y su sobrino José Manuel Morales Marroquín, hermano e hijo del presidente Jimmy Morales Cabrera.

Ante el Tribunal Décimo Tercero Penal declaró el último testigo del juicio del caso Botín. El sindicalista Salvador Fernando Lozano observó un afiche de la entrega de canastas navideñas en 2013. (Foto Prensa Libre: Kenneth Monzón)

Ante el Tribunal Décimo Tercero Penal declaró el último testigo del juicio del caso Botín. El sindicalista Salvador Fernando Lozano observó un afiche de la entrega de canastas navideñas en 2013. (Foto Prensa Libre: Kenneth Monzón)

Salvador Fernando Lozano, secretario general del Sindicato de Trabajadores del Registro General de la Propiedad, fue el último testigo en el juicio.

Su declaración fue desestimada por la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci) porque su testimonio respecto a la entrega de canastas navideñas en el 2013 ya había sido revelado por otros actores del juicio.

Sin embargo, los jueces avalaron su testimonio con el objetivo de conocer todas las aristas del caso y esclarecer la verdad de los hechos relacionados a las supuestas plazas fantasma y otros eventos que se pagaron pero que no se brindaron.

El testimonio no dejó de arrancar risas entre los asistentes a la audiencia, sobre todo por las contradicciones en que cayó el testigo.

El fiscal Carlos de León cuestionó al sindicalista, quien en todo momento se notó dudoso acerca de la entrega de las canastas navideñas, hecho que ocurrió el 2 de diciembre del 2013. “La entrega era costumbre, se hacía en diciembre de cada año y el evento estaba presupuestado”, refirió.

-“¿Recuerda las canastas navideñas?”, le cuestionó el fiscal

-“Recuerdo que no recuerdo las canastas”, respondió el sindicalista.

En la sala de audiencias algunos abogados y sindicados rieron al escuchar la respuesta del testigo.

Entonces el fiscal solicitó que le mostraran la prueba 5, un afiche informativo del 9 de enero del 2014, que se pegó en las paredes del Registro y fue titulado “Actividades festivas navideñas en el edificio central del Registro General de la Propiedad”. El cartón tiene fotografías de la entrega de las canastas navideñas que preparó Abdy Estrada García, una de las implicadas.

-“Este es un evento de villancicos”, indicó Lozano.

La respuesta no dejó complacido al fiscal quien le cuestionó si había recibido alguna canasta y la respuesta fue sí. Entonces, finalizó el interrogatorio.

Durante la audiencia, en la primera fila, estuvo atenta en todo momento la exregistradora Anabella de León.

Los que declararon

Con el testimonio de Lozano sumaron 84 testigos y ocho peritos que declararon desde que inició el debate en la Sala de Audiencias de Mayor Capacidad, conocida como megasala, el 30 de agosto del 2017.

Según el Ministerio Público, la canasta que recibieron los empleados tenía 11 productos y fue cotizada en Q159.50. No obstante, el Registro pagó Q269 mil 933 a través de tres facturas por 564 canastas, lo que significa que cada una costó Q478.60, más de tres veces el precio comercial.

De acuerdo con la investigación, Sammy Morales está señalado por la factura de Plus Espectáculos y Promociones, S. A., por Q89 mil 975, pagados por el Registro. Para ello, la empresa simuló un evento de alimentos para 40 personas, de tres tiempos de comida, por tres días, que habrían sido servidos durante la elaboración de un “proyecto de plan operativo anual”, pero en realidad cubría el costo de las canastas, según el expediente.

La investigación determinó que el Registro también pagó a Fulanos y Menganos Q90 mil por 564 desayunos que no fueron servidos, cantidad que coincide con el número de canastas.

Otra factura de Plus Espectáculos por Q89 mil 958, detalla la compra de las canastas que fueron entregadas por Abdy Estrada García, madre de la exnovia de José Manuel Morales Marroquín.

Qué sigue

El próximo 28 de mayo fue fijado por los jueces Edna Maxia, Jaime González y Juan Aceituno, para la continuación del debate. Se prevé la incorporación de las pruebas documentales de la defensa. Algunos abogados explicaron que son más de sesenta documentos, por lo cual la discusión se hará en dos audiencias.

En junio será la fase para que las partes planten pruebas nuevas. Ni la Fiscalía ni la defensa han adelantado criterios al respecto, aunque aseguran que ya preparan sus nuevos argumentos.

La fase de las conclusiones se hará después del 20 de junio. El Tribunal prepara su agenda para separar otros debates y dedicarse durante dos semanas a escuchar los alegatos del fiscal De León y los defensores de los 25 acusados.

La última palabra a los enjuiciados se escuchará la última semana de junio cuando se programe la lectura de la sentencia. El Tribunal espera finalizar con el debate la primera semana de julio.

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