¿Cuál es el panorama para la segunda vuelta electoral?
De León: Considero que la segunda vuelta será atípica, en tanto que un paradigma ya se rompió en la primera vuelta, y es que el que quedaba segundo en el proceso anterior pasaba de primero en el actual proceso, y ahora vemos que el último de la cola pasa a primero, y esto es lo atípico. Por otro lado, nos enfrentamos a un personaje sin ninguna experiencia, sin ningún pasado en manejo de la cosa pública, sin conocimiento profundo del Estado y que por lo tanto no tiene un pasado al cual se le pueda señalar o achacar, contrario a la contendiente, que tiene un pasado que conocemos y que el gobierno del cual formó parte con su esposo está señalado de malos manejos y corrupción.
Macdonald: Hay una nueva representación del ciudadano, no a través de los medios de comunicación tradicionales, que pudieran ser la televisión abierta, formalmente, y los otros medios que de una u otra forma están ahí, sino las redes sociales. Han cobrado una vigencia paradigmática, como no la tenían en los últimos años.
Por ejemplo, un candidato llega sin programas, sin proyectos, sin formalidad estructural, y una mujer que hace cuatro años le fue impedido llegar a ser propuesta como candidata porque había cometido un delito de fraude de ley.
¿Cómo le podría ir a Morales en la segunda vuelta?
Macdonald: Jimmy Morales no es un outsider —competidor desconocido—. Participó ya en política; aunque no fuera partidista formalmente, ya era un candidato a la alcaldía de Mixco hace cuatro años. Tampoco es un antipolítico, porque forma parte del sistema. Ni es un antisistema, porque forma parte de un partido que, de hecho, es organizado por militares de Avemilgua. Es un error considerar a Jimmy como un outsider.
¿Le servirá a Sandra Torres venderse como la creadora de los programas sociales?
De León: Ella conoce muy bien este tema, porque ella lo manejó; sin embargo, no le funcionó mucho en esta primera vuelta. La UNE tiene, por lo visto, además de ser el partido con mucha más organización a nivel nacional con el número de afiliados, una experiencia y estructura y tiene un voto cautivo, un voto cautivo que votó por Sandra Torres.
¿Qué hay de bueno y malo en la forma de vestir de Jimmy Morales?
Macdonald: Jimmy es un hombre joven, es un hombre que sale con un gran fondo blanco, que eso significa pureza, que eso significa transparencia, que significa toda la realización de la blancura. Y asocia la corbata roja y luego la cambió a celeste; la corbata roja la manejaban hace 20 años los presidenciables como un símbolo del poder.
¿Y qué hay con Torres?
Macdonald: La hicieron más sonriente, y quienes la conocen saben que no es así, es una sonrisa Colgate, y todos saben que es una sonrisa fingida que impone la necesidad de dulcificar su imagen. Aparte, el collar es signo de elegancia, es sinónimo de un nivel alto en la sociedad.
¿Cómo deberían cambiar su estrategia visual?
De León: Con Jimmy Morales es sencillo, tiene que salir con corbata y con saco, porque si no, se ve poco serio ante un posible gobernante; aquí tiene que ser activo, tomando en cuenta que el nuevo actor en la política son las redes sociales, pero sobre todo de manejar emociones. El formato no va ser el mismo, en este caso se trata de convencer a la mayoría del electorado, y no ya a un solo grupo que le aseguraba la segunda vuelta.
¿Cómo ve que Morales solo ha viajado a Estados Unidos?
Macdonald: Tengo la impresión de que Jimmy tiene muy concreto su idea de lo que está haciendo, la gente lo cree ingenuo en política, esa es la imagen que da, pero en realidad hay personas atrás que saben y manejan cosas muy positivas. Fue a darle gracias a la gente que envía plata y sostiene la economía.
