“Cuando nuestro equipo llegó al lugar había una muchedumbre en la casa [de la víctima]. La policía consiguió sacarle y llevarlo al hospital pero no le pudieron salvar”, indicó el responsable.
“Hemos detenido a seis personas y desplegado a efectivos adicionales para evitar nuevos incidentes”, añadió.
El hijo de Akhlaq, de 22 años, resultó gravemente herido en el ataque y está en la unidad de cuidados intensivos.
Matar vacas está prohibido en la mayoría de Estados de India, un país de mayoría hindú donde también viven musulmanes (13% de la población), católicos y budistas.
En marzo, el estado de Maharastra fue más lejos y prohibió también poseer carne de vaca, una medida que según las minorías religiosas demuestra la influencia cada vez mayor de los extremistas hindúes desde que el primer ministro Narendra Modi, un nacionalista hindú, llegó al poder.
Antes del linchamiento un ternero había desaparecido del pueblo. Pero según explicó Sajida, la hija de la víctima, al periódico The Indian Express, la familia tenía en su nevera carne de cordero y no de vaca.