En el caso de integrantes de cuerpos de socorro como Bomberos Voluntarios, Bomberos Municipales o Cruz Roja. Algunos tuvieron que pedir permiso en el lugar de trabajo para acudir a las tareas de rescate.
Sería imposible mencionar a cientos de personas particulares que desinteresadamente acudieron al lugar de la tragedia para dar desde palabras de consuelo, ayudar a trasladar pertenencias de los afectados, distribuir alimentos o bien, cavar con alguna herramienta en el árido terreno.