El departamento de Comercio de Estados Unidos autorizó una licencia por 90 días para que la compañía continúe con las redes existentes en sus dispositivos.
La intención, según Wilbur Ross, secretario de Comercio estadounidense, es “mantener y respaldar las redes y equipos existentes y actualmente en funcionamiento, incluidas las actualizaciones de software de los dispositivos”.
La tecnológica china reaccionó a través de un comunicado para reiterar que el funcionamiento de sus dispositivos continuará sin inconvenientes.
“Los smartphones y tabletas de Huawei ya existentes, es decir los que ya se vendieron y los que están actualmente a la venta y en inventario, se podrán usar con total normalidad y no se verán afectados”, se detalle en la información. “Asimismo, éstos podrán seguir utilizando y actualizando los servicios de Google como Google Play, Gmail, etc. De igual manera, estos dispositivos seguirán recibiendo las actualizaciones de los parches de seguridad de Google y podrán actualizar sin problema alguno todas las aplicaciones disponibles en Google Play, incluyendo todas las aplicaciones de terceros”.
La reacción del gobierno de Estados Unidos ocurrió luego algunas compañías como Qualcomm o Intel, que proveen de partes y productos a Huawei, se vieran afectadas por la decisión económica.
Detener las operaciones de la compañía asiática, además, podría tener consecuencias negativas en la cobertura de servicios en zonas rurales de Estados Unidos, reportó CNET.
Pese a que todavía no hay certeza de lo ocurrirá cuando pasen los 90 días del levantamiento, el gesto de Google y Huawei plantearía un futuro optimista en el plano tecnológico.
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