Y esto a pesar de que el pasado agosto, en un solo día en medio de la debacle bursátil, Wang perdió US$3 mil 600 millones.
El aumento de su fortuna fue posible por la salida a Bolsa de dos filiales del grupo Wanda, a pesar de las decepciones sufridas por la economía china, que pierde fuelle.
Según el magnate, en China es mucho más productivo influir en las fuerzas del mercado y mostrar creatividad que el tradicional recurso a las “redes” personales.
“Es bueno tener dinero”, dijo ante la prensa en Pekín este exoficial del Ejército Popular de Liberación, de 61 años, en una breve aparición tras el anuncio de la nueva clasificación de Forbes.
“La mayoría de la gente que tiene dinero, y muy especialmente las personas extraordinariamente ricas, son buena gente”, aseguró.
Teniendo en cuenta el ritmo al que aumenta su fortuna, en los apenas siete minutos que apareció este lunes ante la prensa podría haber ganado US$200 mil dólares.
A principios de año, el multimillonario compró por €1 mil 050 millones la empresa suiza de marketing deportivo Infront, encargada entre otras cosas de comercializar los derechos de retransmisión del Mundial de Fútbol, y dirigida por un sobrio de Joseph Blatter, el presidente suspendido de la FIFA.
Después se hizo con el 20% del capital del club de fútbol español Atlético de Madrid.
Wang Jianlin pasó este año de la cuarta posición de la clasificación de Forbes a la primera, destronando a Jack Ma, fundador del gigante chino de comercio en línea Alibaba.