Las autoridades responsabilizaron del ataque en el altiplano andino al Ejército de Liberación Nacional (ELN) , la segunda guerrilla más grande del país.
Once de los fallecidos pertenecían al ejército y uno más era policía. Seis personas se encuentran desaparecidas, incluyendo dos trabajadores electorales y un guía indígena, informó el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas.
Villegas señaló que el grupo transportaba a la capital 130 papeletas electorales de los habitantes de la reserva U’wa para su conteo, luego de la votación del domingo último, en un extremo del popular parque nacional Sierra Nevada del Cocuy.
- En video/archivo vea: “9 muertos en operativos contra ELN y Clan Úsuga en Colombia”.
“Estaban custodiando la libertad política de nuestros hermanos U’wa”, dijo Villegas en conferencia de prensa, y agregó que un alto comando militar se trasladó al área para supervisar los esfuerzos para localizar a los desaparecidos, así como a los atacantes.
El ELN es una guerrilla de inspiración cubana que había entablado negociaciones exploratorias de paz con representantes del Gobierno durante más de un año, pero al mismo tiempo se rehusaba a emular a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) e iniciar negociaciones formales con la intención de finalizar con más de medio siglo de derramamiento de sangre.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, expresó sus condolencias y dijo que el ataque manchó lo que habían sido las elecciones más seguras que había tenido el país en décadas, con una reducción de 60% de la violencia en relación con los comicios previos del 2011.