En los tres nosocomios el ministro se reunió con los directores ejecutivos y con el cuerpo médico para analizar la situación presupuestaria y de abastecimiento de medicamentos.
“Coincidimos en que la situación es dramática. La falta de insumos es una realidad innegable y eso limita las posibilidades de la prestación de servicios de una manera adecuada y digna a los pacientes”, expresó Rayo.
Afirmó que la problemática principal en el Hospital Roosevelt y General San Juan de Dios, es que no tienen espacios presupuestarios para ejecutar más recursos económicos.
Según el funcionario, otro factor que aqueja a los dos nosocomios más grandes a nivel nacional es que algunos proveedores están imputados penalmente y otros despachan únicamente con pago en efectivo.
“En el Hospital Regional de Occidente se mantienen los servicios, aunque no se atiende todas las necesidades. Ha habido despilfarro, malos manejos y mucha injerencia política”, expresó.
En crisis
El 9 de noviembre último los hospitales de Amatitlán, Roosevelt y Quetzaltenango no atendieron las consultas externas debido a que los médicos no habían recibido pago y se reportó desabastecimiento de medicinas.
"La situación es dramática", afirma ministro de @saludguatemala, Mariano Rayo, respecto a situación en hospitales. @prensa_libre
— Joel Suncar (@jsuncarpaz) November 15, 2015
El director del Hospital Nacional de Amatitlán, Sergio Alvarado, aseguró que la medida fue adoptada debido a que algunos médicos tenían hasta cuatro meses sin recibir su salario. “Además, hacen falta por lo menos 10 medicamentos básicos y otros insumos como gasas”, indicó.
El lunes recién pasado se contabilizaron cuatro días sin atención en la consulta externa y cirugías programadas en el Hospital Roosevelt por las mismas razones.
La Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), emitió un comunicado en el que señaló que el sistema nacional de salud enfrenta “la peor crisis documentada hasta hoy”, ya que ha golpeado a los tres niveles de atención.
Entre los problemas de la cartera se mencionó el déficit de personal, que el presupuesto de los hospitales es el mismo que el año pasado, niveles bajos en abastecimiento de medicamentos y material quirúrgico, así como instalaciones en mal estado.