“Hallamos entre 30 y 40 túneles dentro de Sinjar” , dijo Shamo Eado, un comandante de los combatientes curdos iraquíes, conocidos como peshmerga, en la localidad. “Era como una red dentro de la ciudad” . Estado Islámico “excavó estas trincheras con el fin de ocultarse de los ataques aéreos y tener libre movimiento subterráneo, así como para almacenar armas y explosivos” , afirmó Eado.
“Este era su arsenal militar” . El video, filmado por un profesional independiente que recorrió el poblado con los combatientes curdos, muestra dos túneles que se extienden varios cientos de metros. Cada uno comienza y termina en alguna casa a partir de agujeros realizados en muros o pisos.
Los angostos túneles, excavados en la roca aparentemente con martillos neumáticos u otro equipo, apenas tienen la altura necesaria para que un hombre esté de pie dentro de ellos.
En los muros hay hileras de sacos de arena, cables eléctricos proporcionan electricidad a ventiladores y puntales de metal que refuerzan el techo. Copias polvosas del Corán yacen encima de pilas de mantas y almohadas.
En el piso pueden verse fármacos que requieren receta médica, como analgésicos y antibióticos.
En otra sección del túnel, las tomas muestran reservas de municiones, incluidos cartuchos de fabricación estadounidense y herramientas para fabricar bombas.
El autoproclamado Estado Islámico se apoderó de Sinjar en agosto de 2014.