De acuerdo con la el artículo seis de la Ley General de Electricidad, el peaje “es el pago que devenga el propietario de las instalaciones de transmisión, transformación o distribución por permitir el uso de dichas instalaciones para la transportación de potencia y energía eléctrica por parte de terceros”.
Es decir que los generadores y usuarios del fluído eléctrico deben pagar por utilizar dichas instalaciones, similar a lo que haría un transportista o conductor individual en una carretera en donde se cobre por transitar, como sucede en la autopista a que conduce del municipio de Palín a la ciudad de Escuintla.
Según la CNEE, las obras adicionadas a la red son las subestaciones Pamplona y Santa Mónica (ubicadas en el área metropolitana), que forman parte del plan de expansión de transmisión de la empresa para el período del 2013 al 2019, en cuyo plazo planea invertir US$35 millones.
En los últimos años, el área metropolitana ha mostrado un crecimiento de la demanda de electricidad de 2.5% promedio anual, y se espera que aumente, comentó recientemente Eduardo Arita, gerente de Trelec.
El área metropolitana y central del país es cubierta por la distribuidora Empresa Eléctrica de Guatemala, S. A. (EEGSA), afiliada al Grupo EPM, de capital colombiano.
Funcionarios y ejecutivos han explicado que con este tipo de obras se disminuye la vulnerabilidad del sistema ante incidentes o posibles suspensiones de servicio, y se aumenta la confiabilidad, lo cual ayuda a impactar en forma positiva en los negocios.
En el área metropolitana se prevé que la demanda siga en aumento por usuarios residenciales, centros comerciales, carreteras privadas y zonas industriales y bodegas, explicaron.