Desde el 14 de noviembre recién pasado Costa Rica ha otorgado unas 5 mil visas de tránsito a emigrantes cubanos que llegaron por la frontera con Panamá, cifra que subirá a 6 mil en las próximas horas, según han anunciado las autoridades.
Los cubanos, casi todos con pasaporte, salieron legalmente de la isla hacia Ecuador, que hasta el 1 de diciembre no les exigía visa. Desde allí se movilizaron por Colombia y Panamá hasta llegar a Costa Rica.
Los emigrantes, de los cuales unos 3.800 reciben ayuda humanitaria en albergues habilitados por las autoridades de Costa Rica, están varados en este país en su ruta hacia Estados Unidos porque Nicaragua les prohíbe el ingreso a su territorio.
A Panamá, Colombia y Ecuador, Costa Rica también les solicitó que “incentive a estas personas a no migrar porque las condiciones en Costa Rica no están dadas para seguirlos recibiendo” , dijo el canciller.
“A los cubanos les solicitamos que no lo hagan (migrar). No pueden contar con que Costa Rica los pueda atender adecuadamente porque tenemos limitaciones” , expresó el ministro.
González aseguró que su país nunca ha atendido a tanta gente y por tanto tiempo en albergues, ni siquiera a causa de un desastre natural.
El ministro afirmó que Costa Rica no cerrará su frontera a los cubanos y que tampoco deportará a Cuba a los que están varados, pero aclaró que las capacidades para brindarles ayuda humanitaria son “limitadas” .
“Confiamos en que esto se va a solucionar, pero no sabemos cuándo, no está en manos únicamente de Costa Rica (…) Esto se le ha salido de las manos a la región como un todo cuando estos flujos se iniciaron hace tres o cuatro años” , manifestó González.
El pasado 24 de noviembre, durante una reunión de cancilleres del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) , de México, Ecuador, Colombia y Cuba, fracasó la propuesta de Costa Rica de crear un corredor humanitario a través de la región.
En esa cita Nicaragua mantuvo su posición de no permitir el paso a los isleños y acusó a Costa Rica de “manipular” la crisis para legitimar las políticas migratorias estadounidenses que dan beneficios a los cubanos que lleguen de manera ilegal.
El canciller costarricense también criticó la “desatención” del SICA a este problema y enfatizó en que es en circunstancias de este tipo que “el sistema debe probar que sirve y que atiende los problemas con seriedad y sentido de urgencia” .
El martes Belice descartó la posibilidad de convertirse en un puente aéreo para los cubanos, misma decisión que tomó Guatemala la semana pasada.
El objetivo era que los cubanos varados en Costa Rica salieran en avión hacia Guatemala o Belice y que desde allí se trasladaran en autobuses hasta la frontera con México, país que según González, los dejará pasar solo si ingresan por tierra.