El país asiático fue sacudido por la polémica que generó el proyecto original, un diseño del arquitecto británico-iraní Zaha Hadid, que tras ser aprobado, fue cancelado por los crecientes costos lo encaminaban a convertirse en el estadio más caro del mundo.
Los dos planes en concurso eran diseños de arquitectos japoneses, que compitieron ante el Consejo Japonés del Deporte. El plan de Kuma tiene un costo de 149.000 millones de yenes (1.200 millones de dólares, 1.120 millones de euros) , mientras que el otro proyecto, de Toyo Ito, tenía un valor estimado en 149.700 millones de yenes.
“Vamos a hacer que este estadio sea lo más accesible para todos los públicos y que sea una fuente de inspiración para el resto del mundo” , dijo Abe.
En las imágenes del proyecto presentadas la semana pasada el futuro edificio está concebido como una estructura para 60.000 personas, con balcones para vegetación detrás de las tribunas.
“Es el estadio de los árboles y de las zonas verdes” , situado dentro de una zona boscosa, pensado para ser “un espacio de convivencia para todos” , dicen los creadores en el proyecto presentado.
El plan estipula que el proyecto quedará terminado en noviembre de 2019, antes de la fecha límite impuesta por el Comité Olímpico Internacional en enero de 2020.
La ceremonia de apertura de los JJOO-2020 está prevista para el 24 de julio.