Pero, ¿qué es una muñequita quitapenas? Se cree que esta diminuta figura popular llamada muñequito o muñequita quitapenas ayuda a resolver aflicciones.
En mercados de artesanías de Guatemala es común encontrar diminutos muñecos vestidos con indumentaria maya, que no solo se utilizan como elementos decorativos, sino que se les atribuye la capacidad de solucionar problemas, según la creencia popular.
alto, ahora se pueden encontrar de varios tamaños y como decoración de
objetos. (Foto Prensa Libre: Brenda Martínez)
Guatemaltecos orgullosos
La publicación logró obtener casi 2 mil 230 “me gusta” y más de 3 mil 300 comentarios, en donde varios guatemaltecos resaltan el origen de estas pequeñas figuras.
¿Cuál es el origen de estas muñequitas?
Los muñecos quitapenas se convirtieron, en la segunda mitad del siglo XX, en artesanías para los turistas, pero sus antecedentes son prehispánicos, refiere Érick Fernando García, del Centro de Estudios Folclóricos.
Aunque Panajachel, Sololá, es de población kaqchiquel, es vecino de la región tz’utujil, reconocida por la preservación de un fenómeno religioso llamado Rilaj Mam —abuelo sabio— o Maximón, que es la supervivencia de unos envoltorios identificados desde el período clásico (250-900 después de C.), que constituían emblemas del poder de los soberanos mayas.
En su interior, se conservaba un objeto sagrado, realizado, por lo general, en jade —símbolo de la vida eterna por su color y durabilidad—, obsidiana o pedernal, que era envuelto en telas preciosas —probablemente confeccionadas por la madre del soberano, de regio linaje—.
Al ascender al trono, el nuevo gobernante recibía de su madre el envoltorio, equivalente a la corona en las monarquías europeas, añade García.
de cibaque y tela de prenda maya. (Foto Prensa Libre: Brenda Martínez)
Los quitapenas no poseen un significado tan relevante, pero también son descendientes de estos envoltorios. Originalmente, debieron contener figurillas cerámicas u otros objetos dignos de relación con el culto, a los que se acude ahora para pedir consuelo.
Según se documentó a mediados del siglo XX en Panajachel, una persona con algún pesar comentaba larga y prolijamente su dolor a la figurilla, la colocaba bajo su almohada o cerca de su cabeza, bajo el petate. Aún mejor si lloraba al hacer un recuento de sus tristezas.
Al amanecer, la pequeña figura había obrado parte de su función, porque había disminuido la pena del afligido. Luego de varias noches de repetir el proceso, la persona mejoraba, encontraba consuelo.
Para algunos, son solo una curiosidad turística, para otros, son objetos a los que se recurre en una etapa difícil de la vida. Para la cultura guatemalteca, son parte de la herencia milenaria que se ha recibido de la tradición maya.
Pero estos fetiches no solo sirven para resolver problemas, sino que ahora adornan o se transforman en diversos objetos como diademas, llaveros, aretes, lapiceros, separadores de libros e imanes para colocar en el refrigerador.
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