Pero para algunos alemanes que ya estaban inconformes en torno a los cerca de un millón de solicitantes de asilo admitidos en el país el año pasado, el incidente sólo parece confirmar sus temores.
“Esta es la Alemania colorida y cosmopolita’ que Merkel quería?” se preguntó Frauke Petry, líder del partido nacionalista Alternativa para Alemania.
Dicho partido, conocido por sus siglas en alemán, AfD, ha exhortado a que se restrinja el número de solicitantes de asilo que son admitidos en el país, un sentimiento que cada día gana más adeptos dentro del bloque de centro-derecha de Merkel.
“Es inaceptable que las mujeres sean objeto de agresión sexual y atraco por parte de jóvenes migrantes en las calles y plazas públicas en las ciudades alemanas durante la noche” , dijo Andreas Scheuer, secretario general de la Unión Social Cristiana, el ala bávara del partido de Merkel.
“Quienquiera que no acepte nuestras reglas de convivencia, incluido el respeto hacia las mujeres, no tiene sitio en nuestra sociedad aquí en Alemania” , dijo Scheuer.
Su partido ha hecho un llamado a establecer un límite de 200.000 solicitantes de asilo en el país al año, una exigencia que posiblemente cuente con el respaldo de los legisladores durante una reunión el miércoles con Merkel.
Cautelosos
Otros en Alemania se mostraron cautelosos de vincular el tema migratorio a la violencia en las calles sin que se conozcan todos los hechos sobre el incidente.
“Es completamente inapropiado… vincular a un aparente grupo de norafricanos con los refugiados” , dijo la alcaldesa de Colonia, Henriette Reker, a la prensa luego de una reunión de emergencia el martes con la policía.
Personas provenientes de Siria, Albania y Kosovo encabezaron la lista de solicitantes de asilo en Alemania el año pasado.
Cem Ozdemir, un legislador de origen turco del Partido Verde, describió los ataques como “horribles y profundamente misóginos” .
“Las mujeres deben sentirse a salvo en todos lados sin importar dónde o cuándo” , recalcó.
El jefe de Policía de Colonia, Wolfgang Albers, dijo que no ha habido arrestos hasta el momento.
“Por el momento no tenemos ningún sospechoso, así que no sabemos quiénes fueron los que lo hicieron. Todo lo que sabemos es que los policías en el lugar percibieron que se trataba en su mayoría de hombres jóvenes de entre 18 y 35 años de edad y de la región arábiga o del Norte de África” , afirmó, y pidió que los testigos se acerquen con la policía, especialmente si grabaron videos de las agresiones.
Críticas a Merkel por política de refugiados
Las críticas a la canciller Ángela Merkel arreciaban este miércoles por su política de puertas abiertas a los refugiados, tras la ola de agresiones sexuales ocurridas en Nochevieja en Colonia, que sus detractores atribuyen a migrantes.
Lo ocurrido en Colonia, en portada de todos los grandes medios este miércoles, complica la tarea de la canciller en este inicio de año, al hacer resurgir los temores de la opinión pública por el flujo sin precedentes de migrantes llegados de Siria, Irak o Afganistán, y las dudas sobre la capacidad de Alemania de integrarlos en ese país.
La Policía local indicó el miércoles a la AFP que había recibido más de un centenar de denuncias de mujeres agredidas en la noche de San Silvestre.
Merkel deberá enfrentarse esta miércoles en Baviera (sureste) a la furia de la rama local de su familia política, la CSU, que la invitó a su primera reunión del año para volver a explicarle hasta qué punto considera peligroso para el país su apuesta por los refugiados.
“Si los demandantes de asilo o refugiados participan en agresiones como las de Colonia, estos actos deben suponer el fin inmediato de su estancia en Alemania” , afirmó el secretario general de la CSU, Andreas Acheuer.
Los detractores de Merkel, movilizados
Pese a que las autoridades han repetido hasta la saciedad de que no tienen pruebas de que haya refugiados implicados en las agresiones, los detractores de la canciller insisten en culparlos, basándose en testimonios de víctimas que hablan de asaltantes de apariencia “norteafricana” o “árabe” .
Tras los incidentes, “Alemania es ya lo suficientemente abierta al mundo y multicolor para usted, señora Merkel?” , ironizaba Frauke Petry, responsable del partido populista Alternativa para Alemania, que avanza en los sondeos desde hace meses y previsiblemente entrará en tres nuevos parlamentos regionales en las elecciones de marzo.
Las teorías del complot florecen en internet y entre los movimientos populistas, acusando a los grandes medios de haber silenciado lo ocurrido en Colonia para no alimentar el discurso antimigrantes.
Como ocurre desde hace meses cuando se trata de refugiados, varios sitios de información en línea han preferido cerrar los comentarios en sus noticias al respecto para evitar que se conviertan en espacios de desahogo xenófobo o racista.
La policía local no informó sobre lo ocurrido en Nochevieja hasta el lunes, tres días después, y no explicó la magnitud de las agresiones hasta el martes, lo que enfureció al ministro del Interior, por la inacción de las fuerzas del orden el 31 de diciembre.
Este último exigió que no haya “tabúes” sobre el origen extranjero de los agresores, pero pidió que no se estigmatice a los refugiados.
Otros actos similares de menor alcance fueron denunciados en Hamburgo (norte) y en Stuttgart (suroeste) en Nochevieja.
En ese contexto, la presión sobre Merkel para que fije un límite de demandantes de asilo sigue creciendo, máxime cuando, pese al frío, la llegada de refugiados no se detiene, a ritmo de varios miles diarios. En diciembre llegaron al país 127.320 y en todo 2015, 1,1 millones.
