La movilización de los efectivos policiacos y militares abarcaba desde la calle Martí hasta la 3a. calle de la zona 1.
Al lugar fue despachado un helicóptero militar con su respectiva artillería y sobrevolaba el lugar, donde numerosas tanquetas, con elementos de tropa de infantería, cerraban los posibles puntos de huida.
Comienza enfrentamiento
Al iniciar el enfrentamiento el ejército empleó granadas las cuales fueron lanzadas contra el reducto. En ese momento las ametralladoras de las tanquetas comenzaron a disparar ininterrumpidamente contra la residencia donde estaban atrincherados los subversivos.
Agentes de la PN vestidos de particular se apostaron en lugares estratégicos y disparaban hacia las ventanas y puertas del reducto guerrillero.
Faltando 10 minutos para las 17 horas, se hizo presente el jefe del Estado Mayor General de la Defensa, coronel Rodolfo Lobos Zamora, quien por momentos dirigió las acciones.
Lobos Zamora era acompañado por otros altos jefes militares, a poca distancia de donde se desarrollaban el enfrentamiento armado; luego de haber concluido el operativo militar Lobos Zamora llegó hasta el reducto.
Luego de haber inspeccionado el reducto, regresó y dijo a la prensa que la información sería canalizada en forma oficial porque se tenía que hacer un recuento de todo lo incautado en el lugar. También se confirmaría cuántos guerrilleros habían muerto en el lugar, así como cuántas personas vivían en el inmueble vecino.
Todo empezó aproximadamente a las 16 horas, cuando elementos del Batallón de Reacción de Operaciones Especiales (BROE) persiguieron a unos sujetos no identificados, que iban a bordo de un automóvil que entró en la referida residencia.
Los agentes del BROE pidieron inmediatamente refuerzos, por lo que fueron destacados gran cantidad de elementos de tropa y demás fuerzas de seguridad, apoyados por los vehículos artillados.
Para entonces, todo el sector había sido acordonado por las fuerzas de seguridad impidiendo el paso de toda persona para evitar mayores consecuencias, dado lo nutrido del tiroteo que se registraba en ese momento.
Los vecinos del lugar prefirieron cerrar sus puertas y buscar refugio, principalmente los que habitaban en la 4a. calle y 8a. avenida de esa zona 2.
Del inmueble utilizado como guarida comenzó a salir una gruesa columna de humo luego deque sus ocupantes comenzaron a quemar los documentos que allí guardaban.
Ingresan al reducto
A los periodistas que cubrieron el hecho les permitieron ingresar al lugar alrededor de las 18.30 horas. Estos pudieron constatar el estado en que quedó el inmueble.
El vehículo que utilizaron los insurgentes quedó con innumerables impactos de bala y en su interior había un aparato de intercomunicación.
En la sala de la residencia se encontraban los cadáveres de uno de los guerrilleros así como el de la mujer.
El tercer cadáver fue localizado en el baño del inmueble. Los cadáveres aún tenían las armas en las manos, con las que seguramente, respondieron el fuego.
En medio del humo y con las paredes de la casa todavía calientes, por el incendio, los periodistas fueron llevados hasta donde las fuerzas de seguridad encontraron un buzón que contenía armamento de diferentes calibres, literatura subversiva y municiones.