El centro científico publicó el martes un informe en el que se constata la aparición de nuevos ejemplares en nueve puntos distintos de ese país, que van desde la frontera panameña con Colombia hasta el Parque Nacional de Santa Fe, en la provincia occidental de Veraguas.
“Datos recientes de fotos tomadas con cámaras trampa automatizadas en áreas remotas de Panamá, junto con otros avistamientos, muestran que la especie se ha generalizado en ese país” , afirmó Moreno.
Ejemplares de esta especie canina, que científicamente tiene el nombre de Speothos venaticus y también se conoce como perro venadero o perro selvático, “son difíciles de ver y muy rara vez se reportan, incluso cuando se sabe que se encuentran en el área” , apuntó el científico.
Paraguay y Argentina son otros dos países latinoamericanos en los que se tiene constancia de la existencia de perros de monte.
Estos animales tienen patas “cortas y rechonchas” , viven en bosques tropicales y cazan en grupos de hasta 10 ejemplares. Se alimentan principalmente de grandes roedores y son “muy fieros para su tamaño” , explicó Moreno.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, la organización medioambiental más grande y antigua del mundo, estima que la población de perros de monte se ha reducido en los últimos 12 años hasta en un 25 %, de ahí que la considere una especie “casi amenazada” a nivel mundial.
La principal amenaza del perro de monte, según indicó el Smithsonian en un comunicado, es la deforestación, ya que es una especie que requiere para su tamaño grandes extensiones de bosque que pueden llegar a alcanzar hasta las 270 millas cuadradas.