A cuatro días de ser operado para restaurar sus vías digestivas, esta tarde Leal se encontraba muy animado y en su rostro se dibuja la sonrisa que siempre lo ha caracterizado.
“Me siento afortunado y agradecido con Dios por esta oportunidad (de vivir) porque sentí su mano. Él me dio la fuerza para luchar y el optimismo para sonreír a pesar de que la situación era difícil”, dijo con voz quebrada, mientras limpiaba algunas lágrimas de sus ojos.
Leal ingresó al hospital con una obstrucción del conducto que comunica al estómago con los intestinos, lo que le ocasionó una desnutrición severa. Llegó a pesar 120 libras.
Su situación empeoró cuando sufrió una septicemia —infección en la sangre—. Ese fue uno de los momentos, según confesó, en los que llegó a pensar que moriría.
“Lo tomo como un milagro porque hubo un momento en el que estaba prácticamente a punto de fallecer y hoy estoy aquí”, indicó.
Según Leal, está planificado que los médicos le den de alta este viernes, y se prevé que regrese a su casa para continuar con su recuperación en compañía de su familia y de sus seis gatos, a los que extraña.
Espera pronto disfrutar de la gastronomía guatemalteca. “Anhelo unas tortillas con tiras, unos chorizos, los frijoles colados con crema y queso, espero que pronto pueda disfrutar de la comida guatemalteca que tanto valoro”, refirió, pues por el momento es alimentado vía intravenosa.
Proyectos
Nelson Leal tiene un proyecto en mente que pondrá en marcha en cuanto salga del hospital.
“Voy a dedicar toda mi energía y tiempo para hacer realidad la Fundación Orgulloso de Ser Chapín, Funorch, que tiene como objetivo ayudar a los artistas de Guatemala que pasen por una situación como la que yo atravesé”, señaló.
Leal está agradecido con las muestras de cariño y apoyo de los guatemaltecos, y de sus colegas artistas que han organizado conciertos y otras actividades para reunir fondos que son canalizados al pago de su hospitalización y recuperación.
“Estas son acciones que llenan y tienen un valor indescriptible”, manifestó.
