El objetivo es mantener el calor interno, cuando no hay ninguna fuente que lo produzca.
Colocar cortinas gruesas
Son una de las principales formas de proteger la casa de la pérdida de calor a través de las ventanas. Si no quiere gastar en nuevas cortinas, puede cubrir las existentes con materiales como polar (fleece) barato, dice Carl Brennand, subgerente de la página web Moneymagpie. “Incluso se pueden utilizar cortinas de ducha de PVC”, sugiere.
No solo en las ventanas se pueden usar cortinas. La colocación de ellas delante de la puerta de entrada hacia el exterior agrega otra capa de protección, explica el sitio BBC Mundo. Mejor si se eligen colores cálidos como rojo o anaranjado, aconseja el sitio ecologiablog.com, o colores oscuros que retienen el calor como negro o gris.
Aprovechar la luz del sol
La luz natural es gratis y ayuda bastante. Es importante tratar de utilizar la mayor cantidad de calor natural mediante la luz solar y, además, es gratis.
Las persianas y cortinas deben mantenerse abiertas durante el día indica la organización Age UK. Pero una vez que el sol se pone, cerrar las cortinas. Así logrará maximizar el potencial de la casa para retener ese calor. También se recomienda cubrir las grietas en el suelo.
El orden del proceso no va ligado a mañana y tarde, necesariamente: puede ser una habitación que por la mañana no reciba luz alguna mientras que por la tarde sí, por lo que es entonces cuando se debe aprovechar la influencia solar, explica el sitio elpais.com
Cubrir pequeñas corrientes de aire
Una gran cantidad de corrientes de aire entran a través del buzón de cartas. Por ello, vale la pena poner una barrera adicional en este orificio.
Lo mismo ocurre con las cerraduras, que pueden ser protegidas con”una tapa circular sencilla que se desliza por encima, especialmente útiles para las cerraduras antiguas, más anchas. También se aconseja colocar trapos largos (sábanas o toallas que ya no se usen) en las rejillas de ventanas y puertas.
Si al estar cerradas las ventanas se nota que corre el aire, se puede reparar las fugas al aplicar silicona, masilla o burletes (tira de tela rellena de algodón) en los bordes, refiere el sitio mimbrea.com
Suelo térmico
Según la Fundación Nacional de la Energía de Reino Unido (NEF), el piso representa un 10 por ciento de la pérdida de calor en el hogar si no está aislado, aún más si son de madera. Alfombras y mantas pueden ayudar a mitigar este problema y añaden la ventaja de mantener los pies calientes.
Otra idea que puede resultar eficaz es envolverse los pies con papel periódico al entrar al hogar, para que produzcan calor. Por estos días, es mejor dejar a un lado las chancletas o sandalias y preferir las pantuflas.
Comida caliente
En estos días, prefiera preparar un menú que incluya sopas, como las que preparaba abuelita, o rodear las manos con bebidas reconfortantes como té, chocolate o café, que harán que el cuerpo entre en calor.
También se aconseja mantener tanto el vientre como los riñones calientes a través de la ropa o respiraciones profundas (inflando el estómago a la hora de inhalar y desinflándolo a la hora de exhalar).
Mantenerse activo
También se aconseja tener actividad física dentro del hogar, que no solo se refiere a las tareas domésticas, “El ejercicio produce calor debido a que el cuerpo consume energía metabólica y esta lo transforma en un incremento de la temperatura corporal, registrada por el hipotálamo para comenzar la sudoración”, dice elpais.com
Para mantener el cuerpo caliente en invierno hay un truco infalible: proteger la cabeza con un buen gorro. La mayor parte del calor corporal se pierde por la cabeza, pero si utilizas un gorro de invierno ya sea de lana, pelo o cualquier otro material cálido sentirás como tu cuerpo está caliente por más tiempo, explica el sitio belleza uncomo.com.
No recomendable
Se desaconseja, por seguridad de la familia, mantener encendidas las estufas de gas o eléctricas o quemar leña o carbón (no solo es contaminante sino que puede representar peligro para los niños).