Alrededor de un 8 por ciento de los varones de 40 años presentan disfunción eréctil, una cifra que se quintuplica entre los hombres que superan los 60 años. “Se calcula que, por el progresivo envejecimiento de la población y la falta de hábitos saludables, esta cifra aumentará hasta los 322 millones de casos en todo el mundo que se prevén para el 2025”, según el sitio abc.es.
Los hábitos de vida poco saludables como el tabaco, el alcohol, el sedentarismo o la presencia de obesidad son factores determinantes para la aparición de la disfunción eréctil. Diversos estudios muestran que esta patología afecta a uno de cada cuatro fumadores y a más del 20 por ciento de los hombres con sobrepeso.
El sobrepeso es un factor que afecta tanto a las ganas de tener intimidad como la autoestima, pero de manera diferente entre hombres y mujeres —asegura esta especialista en sexología—. Los hombres suelen tener problemas de disfunciones sexuales a diferencia de las mujeres, que les afecta al deseo, que brilla por su ausencia.
Cardiovascular: El corazón de una persona obesa trabaja hasta 30 veces más al necesitar una mayor cantidad de sangre y oxígeno. Esto afecta directamente a la resistencia y a la disfunción eréctil. Además, las personas con sobrepeso se cansarán antes y finalmente realizarían únicamente aquellos movimientos que les supongan menos esfuerzos, al afectar especialmente en las posturas en las que todo el peso recae sobre articulaciones inferiores y rodillas.
Disfunción eréctil: Se cree que alrededor del 80 por ciento de los hombres que sufren disfunción eréctil tendrían un Índice de Masa Corporal (IMC) superior a 30, lo que aumenta el riesgo cuando el IMC es mayor que 25. Esto es consecuencia del bloqueo de los vasos sanguíneos que impediría el flujo adecuado al pene.
En el hombre también es común el síndrome de pene oculto en el que el exceso de tejido adiposo oculta este órgano lo que dificulta las relaciones sexuales.
Hormonal: El sobrepeso en las mujeres altera los niveles de progesterona y estrógenos, dificulta la ovulación y afecta al ciclo menstrual. Además, favorece la resequedad vaginal, lo que influye, por tanto, en el deseo sexual y en la fertilidad.
Estudios confirman que los hombres desarrollarían problemas de fertilidad al reducirse sus niveles de espermatozoides y padecerían mayor riesgo de desarrollar cáncer de próstata.
Psicológico: Principalmente las mujeres con sobrepeso suelen dejar de sentirse atractivas sexualmente, lo que les produce inseguridad al verse desnudas y disminuye las ganas de mantener un intimidad con sus parejas.
Problemas para encontrar pareja
Según datos de la encuesta ¿Interfiere el exceso de peso en tu relación?, realizada por el Método PnK, en España, el 74 por ciento de los encuestados responde que el sobrepeso u obesidad afecta de forma negativa una relación de pareja, al considerar que el principal problema es la baja autoestima con un 52 por ciento, seguido de problemas sexuales, 31 por ciento y problemas para concebir, 16 por ciento.
Además, el 93 por ciento de las personas cree que el hecho de padecer sobrepeso u obesidad dificulta encontrar pareja y, por otro lado, el 91 por ciento afirma que perder peso en pareja puede ser positivo para la relación.
Si se analizan los datos por grupos de edades se pueden observar grandes diferencias al preguntarles, por ejemplo, si creen que el sobrepeso afecta a una relación de pareja. Mientras que el grupo de 18 a 30 y de 31 a 55 más del 60 por ciento de los encuestados creen que afecta de forma negativa, el 75 por ciento de los mayores de 55 años opina que el sobrepeso no interfiere en una relación.