El 19 de diciembre de 2014 fueron localizados los cadáveres de tres personas en el bulevar El Naranjo, zona 4 de Mixco y las fuerzas de seguridad establecieron que las víctimas fueron degolladas y tenían heridas de arma blanca; dos de ellas tenían grilletes.
Dos días después, en un allanamiento en un edificio de apartamentos en la 11 avenida 12-63, zona 1, fueron detenidos los ahora condenados.
La pesquisa del MP detalla que Méndez Gutiérrez -administrador del edificio- subió al apartamento número 305 a verificar el escándalo que los inquilinos iniciaron al calor de los tragos por el juego del partido entre Rojos y Cremas. El reclamo de Méndez encendió la irá de Robin Morales, por lo que la víctima le recordó que además de ser problemáticos debían más de dos meses de renta.
Minutos después del enfrentamiento verbal, Méndez Gutiérrez, regresó al apartamento 404 y en compañía del exadministrador Jairo Antonio Velásquez y José Ángel Casimiro Vásquez, exigieron el pago de la renta atrasada y que dejaran el escándalo que perturbó la tranquilidad de la vecindad. Fue entonces cuando uno de los acusados agredió con un arma blanca a Casimiro Vásquez, quien murió en el acto.
Las pruebas de luminol detallan que el cadáver fue arrastrado del tercer nivel al apartamento 305 y luego a la puerta del 301, posteriormente bajaron al occiso al parqueo, lo colocaron en la palangana del picop de una de las víctimas mientras que Méndez Gutiérrez y Velásquez fueron golpeados y para evitar que huyeran les colocaron unos grilletes.
A través de las imágenes de una cámara, ubicada frente al inmueble, se confirmó cómo uno de los victimarios usó una linterna para intentar bloquear y evitar que sean reconocidos.
Uno de los hombres, ahora condenado, no advirtió que una segunda cámara en la 12 calle, captó el paso del vehículo con los tres cadáveres en el área de carga.
Cerca de las 22 horas, el picop con las víctimas y el cadáver abordo salen del edificio. Cámaras de vigilancia de la Policía ubican el vehículo en el bulevar El Naranjo, zona 4 de Mixco. Según la investigación, detrás de una valla publicitaria los detenidos degollaron a Méndez Gutiérrez y a Velásquez, quienes para borrar evidencia rociaron con una sustancia química los tres cadáveres, les prendieron fuego y huyeron.
Más tarde, quemaron el picop en la 6 avenida y 26 calle de la Colonia Lo de Bran III, Mixco. El automotor estaba a nombre de la empresa Corporación Integral de Inversiones S.A.
Luego de quemar los cuerpos y el vehículo, los victimarios regresaron al centro de la ciudad para terminar de limpiar los rastros de sangre.
