De acuerdo con la investigación del Ministerio Publico (MP), Gómez Esquité le lanzó una granada a Francisco Brokss Zabala, 30, alias el Jericó, quien se encontraba en el resguardo dos de la Granja Penal de Cantel.
Miguel Canastuj, juez del Tribunal Primero de Sentencia Penal de Quetzaltenango, donde se dictó la condena, indicó que con el relato de los agentes del Sistema Penitenciario y de otros reclusos, se comprobó que el condenado llevaba la granada en un sudadero y pretendía matar a Brokss, quien resultó ileso.
José Chaclán, agente fiscal del MP, explicó que el estallido de la granada abrió un agujero en el suelo y causó que se quemara un colchón, así como ropa.
Agregó que después de haber lanzado el artefacto, el condenado se resguardó de la explosión en un baño del penal, donde también permanecía recluido.
Rivalidad
Según autoridades, el ataque se originó por rivalidad entre ambos, ya que pertenecen a pandillas distintas. La fiscalía del MP no estableció la forma en la que el condenado habría ingresado la granada al centro carcelario en julio del 2015, cuando ocurrió el atentado.
Hecho Similar
El 16 de julio de ese año, reclusos del centro preventivo para varones de Quetzaltenango lanzaron dos granadas de fragmentación luego de una riña entre pandilleros de distintos grupos; sin embargo, los artefactos no estallaron.