Internacional

Ola de violencia causa al menos 12 muertos en El Salvador

La violencia que azota a El Salvador causó el martes la muerte de tres policías y seis pandilleros luego de una balacera en en una zona rural de la localidad salvadoreña de Santa Cruz Michapa. En otro hecho, una mujer embarazada, su hija y su nieta de 4 meses fueron masacradas en Ciudad Delgado.

Los agentes son las primeras bajas de la policía en enfrentamientos con pandilleros en el 2016.

Una fuente oficial detalló que en el intercambio de disparos también fueron heridos otros dos integrantes de la Policía Nacional Civil, sin revelar las identidades de los muertos y lesionados ni las circunstancias del intercambio de disparos.

Añadió que en la referida localidad se realizó una “operación de búsqueda” de los pandilleros por lo que los residentes de la zona tuvieron que ser evacuados.

Según trascendió en medios locales, los ultimados eran investigadores de la Policía que fueron emboscados y que los pandilleros murieron al enfrentarse con los cuerpos de Seguridad durante el referido operativo de rastreo.

Con estas bajas, suman al menos 15 los policías ultimados en lo que va del 2016, la mayoría de ellos mientras estaba de licencia.

Según las autoridades salvadoreñas, estos ataques son una estrategia de las pandillas para presionar al Gobierno a entregar prebendas a sus líderes encarcelados, quienes se encuentran bajo un mayor régimen de seguridad desde el pasado 29 de marzo cuando fue declarado un estado de emergencia en 7 de 21 prisiones.
 

Conmoción

Una mujer embarazada, su hija, y su nieta de 4 meses, fueron asesinadas el martes en El Salvador, un crimen “repudiable”  cuyo pronto esclarecimiento ha pedido el procurador para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) , David Ernesto Morales.

Las víctimas fueron identificadas como Marisol Méndez, quien estaba embarazada y era la madre de Alexia Rivera y abuela de Valentina Rivas, de 4 meses, de acuerdo a la escasa información difundida por la Fiscalía.

Datos sobre las circunstancias del triple homicidio y los presuntos responsables no han sido revelados por las autoridades, aunque el procurador Morales dijo que el “repudiable acto evidencia la saña, odio, maldad y violencia irracional con la que operan las estructuras criminales que están atacando a la sociedad y que ahora se cobra la vida de tres mujeres de una misma familia”.

Morales pidió a la Fiscalía que “otorgue prioridad a la investigación y el esclarecimiento” del triple homicidio, “así como de otros relacionados con la violencia contra las mujeres por razones de género”.


Exigió a la Policía Nacional Civil que, en este caso en particular, “se agoten los recursos necesarios y se logré la captura de los responsables, para que posteriormente, las autoridades de justicia impongan, con rigor, las penas correspondientes”.

El procurador se solidarizó con la familia de las víctimas y reiteró su llamado a las autoridades correspondientes a que “impulsen políticas de seguridad con enfoques integrales y prontas respuestas a este fenómeno complejode la violencia con el fin de combatirla con la contundencia necesaria”.

Según la prensa local, que cita datos extraoficiales, la Policía maneja la hipótesis de que las dos mujeres asesinadas estaban vinculadas a una pandilla que opera en el área donde ocurrió el crimen, el municipio de Ciudad Delgado.

El Salvador vive un recrudecimiento de la violencia que entre enero y marzo pasados ha cobrado la vida de dos mil 22 personas, cifra superior en un 73% a la registrada en el mismo periodo del 2015.

Mueren policías en enfrentamiento 

Dos policías salvadoreños se convirtieron el martes en las primeras bajas de ese cuerpo de seguridad en el 2016 a causa de enfrentamientos directos con pandilleros, informó la Fiscalía.

La fuente detalló que en la balacera, en la localidad de Santa Cruz Michapa  (noreste), también fueron heridos otros dos agentes de la Policía Nacional Civil, sin revelar las identidades de los muertos y lesionados ni las circunstancias del hecho.

Según trascendió en medios locales, los fallecidos eran investigadores de la Policía y fueron emboscados por los pandilleros.

En la localidad se efectúa una “operación de búsqueda”  de los pandilleros, añadió la Fiscalía.

Con estas bajas, suman al menos 14 los policías ultimados en lo que va del 2016, la mayoría de ellos mientras estaba de licencia.

Según las autoridades salvadoreñas, estos ataque son una estrategia de las pandillas para presionar al Gobierno a entregar prebendas a sus líderes encarcelados, quienes se encuentran bajo un mayor régimen de seguridad desde el pasado 29 de marzo cuando fue declarado un estado de emergencia en 7 de 21 prisiones.

El Salvador vive un recrudecimiento de la violencia que entre enero y marzo últimos se ha cobrado la vida de dos mil 22 personas, cifra superior en un 73 por ciento a la registrada en el mismo periodo de 2015.

ESCRITO POR: