Entre ellas, contaron cómo en 1982 los soldados masacraron a una comunidad Chel, quemaron las casas, la siembra, violaron a las mujeres jóvenes y mataron a sus habitantes, incluyendo menores.
Una de las pocas supervivientes, que por entonces rondaba los 8 años, recordó “la forma en que el Ejército mató a su mamá, papá y familiares”, según recogió el Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos (CALDH).
Otra mujer relató cómo los soldados que llegaron a su aldea masacraron a la población; los que lograron huir tuvieron que refugiarse bajo piedras en montañas, donde ella tuvo que dar a luz en unas condiciones de hambre y frío.
En estas montañas, los huidos fueron perseguidos y bombardeados, lo que provocó que muchos murieran de “hambre y enfermedades”, insistió el testigo citado por la CALDH.
El martes, otras víctimas ya denunciaron los asesinatos de niños y violaciones de mujeres durante el conflicto armado civil.
Juicio especial
Las declaraciones forman parte del juicio especial que se sigue contra el general José Efraín Ríos Montt y su jefe de inteligencia José Mauricio Rodríguez, por su presunta participación en el crimen de un mil 771 indígenas ixiles en Quiché durante 1982 y 1983.
Ambos, acusados de los delitos de genocidio y lesa humanidad, estuvieron ausentes en esta nueva jornada del juicio por problemas de salud.
Está previsto que la misma termine este jueves, informó el Ministerio Público (MP) en un comunicado.
Hasta ahora, se han celebrado 13 audiencias y en las últimas la parte acusadora ha presentado informes antropológicos que, asegura, confirman los actos de genocidio perpetrados por el Ejército entre 1982 y 1983.
El 10 de mayo de 2013, Ríos Montt fue condenado a 80 años de prisión al ser hallado culpable de genocidio, pero por errores en el proceso la Corte de Constitucionalidad (CC), la máxima instancia jurídica de Guatemala, anuló la condena y ordenó un nuevo juicio. Rodríguez fue absuelto en ese juicio.
En esta segunda jornada de la audiencia, familiares de las víctimas del conflicto armado civil se volvieron a concentrar ante el Organismo Judicial.