Familiares y vecinos de esa comunidad indicaron que el pozo estaba en construcción entre dos viviendas y la fallecida ya había resbalado cerca del agujero dos veces, pero en esas ocasiones quedó sentada en la orilla.
Víctor Soto, de los Bomberos Municipales Departamentales, informó que trabajaron en conjunto con socorristas de Cruz Roja por un lapso de más de 45 minutos para rescatar el cadáver.
Agregó que debido a la profundidad del pozo, debieron de utilizar mascarillas con oxígeno y que por la por la oscuridad se les dificultó extraer el cuerpo.
Vecinos indicaron que no desean que el cuerpo sea trasladado a la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Coatepeque, por lo que hablarán con las autoridades.