El acuerdo se alcanza pocas semanas después de que los papeles de Panamá pusieran al descubierto la actuación de un bufete de abogados de ese país como gestor de la apertura de cuentas en paraísos fiscales para empresas de todo el mundo.
El Secretario General de la OCDE, Ángel Gurría, instó a que la iniciativa, que debe entrar en vigencia en septiembre de 2018, no quede en meras “palabras” y a acelerar la adhesión a los mecanismos multilaterales de control.
“Asistimos ahora a un movimiento imparable hacia el intercambio de información, sobre la base de una norma común única formulada por la OCDE con el respaldo de la comunidad internacional”, dijo Gurría, citado en el comunicado.
Pero “estos compromisos políticos de sumarse a la lucha contra la evasión fiscal deben plasmarse en la realidad práctica (…). Es hora de que los actos pesen más que las palabras”, agregó.
El funcionario mexicano instó “a los países que todavía no lo hayan hecho (…) al Acuerdo multilateral entre autoridades competentes (…), con el fin de que el mayor número posible de países se beneficien de este nuevo entorno más transparente”, añadió.
Un grupo de medios internacionales identificó el mes pasado a 214.000 de empresas que habían abierto cuentas en paraísos fiscales a través del bufete de abogados panameño Mossack Fonseca.
El director del Centro Política y Administración Fiscal de la OCDE, Pascal Saint-Amans, afirmó que Panamá era “el último mohicano” entre los países más reticentes a hacer avances reales en materia de transparencia fiscal.
“Hay países que adoptaron el compromiso de firmar la convención multilateral, pero que no lo hicieron, entre ellos Bahamas, los Emiratos Árabes Unidos y Panamá”, señaló Saint-Amans.