Revista D

El atletismo encarna el lema de los Juegos Olímpicos

Hoy, domingo 15 de mayo del 2016, se publica la tercera lámina del área de Educación Física, dedicada al Atletismo y sus categorías. Búsquela en nuestra edición impresa.

Roberto Villalobos Viato

14 de mayo de 2016

23:21h

El lema olímpico, que del latín se traduce en “más rápido, más alto, más fuerte”, es encarnado en el atletismo, el cual incluye una gran cantidad de disciplinas que despiertan el interés de millones de personas en el orbe.
La historia indica que ha estado presente desde la primera edición de los Juegos de la Antigüedad, en el año 776 a. C, cuando Corebus de Elis ganó la prueba stadium, una carrera de 192 metros.
Con el tiempo, en Grecia fueron apareciendo muchas otras modalidades de carreras, saltos y lanzamientos.
Sin duda, una de las más exitosas fue el pentatlón, que mezclaba el stadium, salto de longitud, lucha y lanzamientos de disco y jabalina.
En siglos posteriores se organizaron eventos para premiar al atleta más completo como parte de las ferias y festivales europeos.
Por toda esta tradición y popularidad ganada, el atletismo ha ocupado un lugar preferencial desde los primeros Juegos Olímpicos Modernos, los cuales se disputaron en Atenas, en 1896. En esa ocasión fueron 12 competiciones, en las que solo podían participar hombres. Ellas, em cambio, compitieron hasta los JJOO de Ámsterdam, en 1928.
En Estocolmo 1912 se empezaron a cronometrar las carreras. En ese entonces, el estadounidense Don Lippincott detuvo el reloj a los 10.6 segundos en los 100 metros lisos.
Hoy, las plusmarcas mundiales de esta rama pertenecen al jamaicano Usain Bolt, quien cronometró 9.58 segundos durante el Mundial de Atletismo que se celebró en Berlín, Alemania, en el 2009; para ellas, el récord es de la estadounidense Florence Griffith (10.49).

Nivel olímpico

El atletismo se divide en cuatro grandes categorías: pruebas de pista, de ruta, de campo y combinadas. Entre las primeras están las lisas —100 metros, 200 m, 400 m, 800 m, 1500 m, 5000 m, 10000 m—, de relevo —4×100 m y 4×400 m—, de vallas —110 m para hombres, 100 m para mujeres, y 400 para ambos— y con obstáculos —3000 m—.
Las de ruta son el maratón —exactamente, 42 mil 195 m— y las pruebas de 20 y 50 km.
En las de campo están los saltos de longitud y triples, de altura y con garrocha. Asimismo, las pruebas de lanzamiento de bala, martillo, jabalina y disco.
Otras competencias ponen a prueba la versatilidad del atleta, las cuales se disputan en dos días seguidos. El decatlón consiste en 10 eventos: 100 m lisos, salto de longitud, lanzamiento de peso, salto de altura, 400 m lisos, 110 m con vallas, lanzamiento de disco, salto con garrocha, lanzamiento de jabalina y 1500 m lisos.
En el heptatlón se incluyen los 100 m con vallas, salto de altura, lanzamiento de bala, 200 m lisos, salto de longitud, lanzamiento de jabalina y 800 m lisos.
Tanto en el decatlón como en el heptatlón, los atletas van sumando puntos. Por lógica, el ganador es quien haya tenido el mejor desempeño global.
Hoy, tanto hombres como mujeres practican la mayoría de estas disciplinas en las grandes justas deportivas.

Material de ayuda

Según los objetivos del Currículo Nacional Base, en su sección relacionada con la Educación Física, refiere que las disciplinas que engloban al atletismo sirven para que los estudiantes puedan desarrollar sus capacidades de resistencia, fuerza, rapidez, flexibilidad y agilidad, pues son vitales para tener una saludable condición física.