El pasado 18 de abril Malmström y Guajardo ya se reunieron en Bruselas y la política sueca dijo entonces que esperaba iniciar “muy pronto” los procedimientos para negociar la modernización del acuerdo, el primero de libre comercio que cerró el bloque comunitario con un país en América.
En la cumbre UE-México del pasado junio en Bruselas, las partes reiteraron su compromiso para emprender la modernización del tratado.
Malmström y Guajardo coincidieron en abril en la “importancia de incluir en el acuerdo comercial modernizado nuevos capítulos para pymes, sobre la lucha contra la corrupción y una mayor transparencia durante las negociaciones” al implicar también a la sociedad civil.
De visita en México esta semana, la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini, señaló que el proceso que van a emprender las dos partes para actualizar su acuerdo global buscará “responder a las necesidades y aspiraciones compartidas” del siglo XXI.
Mogherini corroboró que las negociaciones se llevarán a cabo con la “máxima velocidad”, lo que resultará en un beneficio para los ciudadanos de ambas partes.
Previamente, en marzo, la jefa de la diplomacia de la UE se había mostrado confiada en que la actualización de los acuerdos comerciales con México, pero también con Chile, esté a la altura del tratado recientemente concluido con Canadá y de las ambiciones puestas en la negociación del acuerdo comercial y de inversiones (TTIP) con Estados Unidos.
El responsable de Comercio de la embajada de México en Bruselas, César Guerra, recordó entonces que la UE es el segundo destino de las exportaciones mexicanas y la segunda fuente de inversión extranjera directa, y que el comercio entre las dos partes “casi se ha triplicado en los últimos quince años”.
Guerra destacó que esa actualización debe incluir, entre otros temas, la liberalización del comercio de bienes agrícolas, la revisión de las reglas de origen “con especial énfasis en la acumulación con socios comerciales en común”, o un aumento de la transparencia y cooperación en medidas sanitarias y fitosanitarias.
Además, indicó que el comercio de servicios buscaría “aprovechar las ventajas que ofrece México por las reformas que ofrece en sectores como las telecomunicaciones, el financiero o la energía”.
En materia de inversión, consideró que “es necesario protegerla con los más altos estándares teniendo en mente el nuevo enfoque adoptado por la UE sobre el tema”, en relación con el sistema de tribunales al margen de la Justicia nacional que Bruselas quiere implantar para dirimir en conflictos entre Estados e inversores.