La incorporación en el once titular de Rodrigo Saravia, del Columbus Crew de la MLS, de Moisés Hernández, del Rayo Oklahoma, de la NASL, de Ricardo Jerez, del Alianza Petrolera, de Colombia, y de José Contreras, de Comunicaciones, le trajo réditos al equipo que dirige Wálter Claverí.
Quizás con ellos en el rectángulo de juego, el sábado pasado, no hubiera aparecido la pesadilla vivida contra el cuadro armenio.
Apreciada por un marco de 7 mil 214 asistentes, la mayoría guatemaltecos, la Azul y Blanco se mostró compacta y ordenada en defensa, muy diferente a lo exhibido en la caída contra Armenia; que había encendido las alarmas en el campamento guatemalteco.
Carlos Humberto Ruiz, Luis Martínez y Gerardo Arias, también sobresalieron en el armado nacional, que vio las mayores dificultades en la segunda parte.
Después de un primer tiempo tranquilo y sin mayores apuros, los últimos 45 minutos depararon emociones y preocupaciones para el elenco de Claverí.
El portero Ricardo Jerez demostró sus capacidades al negarle en dos ocasiones la anotación al conjunto vinotinto. La primera, a Salomón Rondón y la segunda, a Luis Manuel Seijas, del Internacional de Brasil.
Los nacionales fueron efectivos en su única llegada de peligro al arco de Daniel Hernández, durante la parte complementaria.
Tinoco, hondureño nacionalizado guatemalteco, se las ingenió para sacar un remate inatajable para Hernández, y colocar así el parcial 1-0. El gol fue un gran tranquilizante para el armado nacional.
Empujados por su capitán Tomás Rincón, del Genoa de la Serie A italiana, Venezuela encontró el empate 1-1, por medio de Rondón, quien pescó un rebote en el área nacional para vencer al fin a Jerez.
El empate sirve para que la Azul y Blanco encuentre la fortaleza y la confianza para continuar con su preparación, de cara al reinicio de la clasificatoria mundialista, en septiembre.
Esta noche tuvo enfrente a un equipo que salió con sus mejores armas, al utilizar a ocho de sus foráneos desde el pitazo inicial. Sin embargo, Guatemala supo responderle y le sembró dudas de cara a su participación en la Copa América Centenario.
