Internacional
Muere ballena piloto de espectáculo de SeaWorld
“<em>Bubbles</em>”, una ballena piloto de aleta corta que vivió en el SeaWorld de San Diego durante casi 30 años, falleció el jueves, informó el parque.
"Bubbles", la ballena piloto de SeaWorld, falleció recientemente, informó el parque. (Foto Prensa Libre: AP)
Se practicará una necropsia para determinar la causa de la muerte del animal, que rondaba los 50 años de edad. “Aunque todos los que la conocieron y amaron extrañarán mucho a Bubbles, ayudó a generaciones de visitantes al parque a obtener una mejor apreciación por los animales y el ambiente marino”, dijo SeaWorld en un comunicado.
Las ballenas piloto hembra a menudo alcanzan los 60 años de edad en libertad y se cree que Bubbles era la más vieja de su especie en cautiverio, dijo el parque.
Fue capturada frente a las costas de California en la década de 1960 y participó en espectáculos de parques marinos durante gran parte de su vida. Vivió dos décadas en Marineland del Pacífico en Rancho Palos Verdes, en donde tenía su propio estadio. Llegó a SeaWorld en 1987, cuando cerró Marineland.
Las autoridades del parque estiman que unas cien millones de personas llegaron a ver el espectáculo de Bubbles. “Nunca vi a un animal saltar mientras daba vueltas como lo hacía Bubbles. Cuando saltaba fuera del agua y giraba, lo hacía a la velocidad del rayo”, dijo Bill Winhall, curador asistente en SeaWorld San Diego, durante un comunicado publicitario de 2010.
El parque cuenta con otras dos ballenas piloto que hacen espectáculos: Shadow y Argo. Las ballenas piloto, que al igual que las orcas pertenecen a la familia de los delfines y se les considera altamente inteligentes y sociables, viven en manadas de entre 20 y 90 ejemplares.
No se les considera en peligro de extinción. Se alimentan de calamares y pescados en su hábitat natural y pueden sumergirse más de 300 metros en busca de sus presas.
Grupos defensores de los derechos de los animales han condenado a los parques marinos por contar con animales que, en estado natural, acostumbran nadar miles de kilómetros.