Hemeroteca

Papá, un héroe

Luego de una jornada de trabajo, toca ponerse el traje de superhéroe en casa. Esta nota del 17 de junio de 2005 nos aconseja como ser un super papá.

Es usted de aquellos hombres que cuando llega a casa se quitan el traje de su profesión u oficio para quedarse sólo con la vestimenta del personaje que todo niño o niña espera con ansiedad…un padre juguetón, comunicativo, interesado y responsable por los requerimientos y sueños de sus hijos?

Si es así, es un modelo a seguir, que merece respeto y confianza de la familia y sociedad, pues la figura paterna debe fungir de esa manera, llenar las necesidades afectivas y espirituales de los infantes, no sólo desempeñarse como proveedor de cosas materiales. En especial porque los niños (as) y jóvenes requieren de su ayuda en cada etapa de la vida.

Cuando se disfruta esa sana experiencia, los adultos se sienten satisfechos y orgullosos de tener como resultado hijos exitosos y con valores, afirma la sicóloga Suzzette Del Valle, del Instituto de Psicología Aplicada, IPSA.

En la niñez

Los padres deben acompañar a su pareja en la estimulación de su pequeño desde que está en el vientre materno. Por ejemplo, acariciarlo, decirle lo mucho que lo ama y desea verlo, eso le favorecerá en su estima, al escuchar esa voz masculina que le afirma que es querido.  Y ese sentimiento lo refuerza cuando atiende sus necesidades: le cambia el pañal, le prepara su leche o le da de comer, lo baña y lo viste. Esa cercanía y contacto hacen que se sienta importante.

Asimismo, en los primeros años necesita de papá porque es el período en que fortalece su seguridad y al descubrirlo, en su mente graba que es quien los protege, ayuda y responde en todo momento, explica la sicóloga educativa Virna Patricia Zamora Sum, de la clínica Procesos.

Al niño en particular le favorece su presencia y comportamiento para desarrollar su identidad.  Aprende lo que observa, no lo que le digan que haga. En algún momento deseará vestirse como papá, pero conforme su crecimiento decidirá qué ponerse y hay que dejarlo, eso le permitirá adoptar su personalidad y desarrollar independencia.

Para las niñas él es el punto de referencia masculina, de quien se enamoran por primera vez, y su forma de actuar será el patrón que buscarán en su pareja cuando lleguen a la etapa adulta, agrega la doctora en sicología Aymara de León, directora de la academia Psicología Contemporánea.

Por ello, es básico que el padre sea cariñoso, responsable, seguro de sí mismo, trabajador, dialogue, escuche, corrija con cariño, sepa organizarse y le dedique tiempo a los chicos, incluso que asista a las actividades del colegio.

Jamás debe mentir, pues los chiquillos se tornarán apáticos y no confiarán más en él. A la vez, tiene que fomentar los valores como el de la colaboración, fraternidad, amor, honestidad, amabilidad, paciencia y persistencia.

En la adolescencia

En esta fase papá juega el papel de guía o facilitador, para ello, es vital una buena comunicación, pero esto es efectivo sólo si en la anterior etapa se logró una adecuada relación de respeto, confianza y afecto. La cercanía y presencia del padre es vital para que los muchachos logren superar los difíciles retos que tienen que enfrentar, en especial el de su independencia emocional y social.

Es ideal que el adulto sea un buen orientador, así que documéntese sobre el tema, asista a charlas que nutran sus conocimientos. También es necesario que juegue el rol de amigo, que sepa escuchar y no sólo criticar.

Mayoría de edad

El padre aún sigue siendo una figura necesaria cuando los hijos alcanzan su adultez. Hay que apoyarlos sin sobreprotegerlos, ni abandonarlos. Dejarlos que tomen sus propias decisiones y aprendan de sus errores. Es importante hacerlos sentir que tienen a una persona a quien le pueden consultar sus proyectos y a un oyente de sus desaciertos.

En su ausencia

Si por cualquier razón los pequeños se crían sin padre, es recomendable que un tío, abuelo o hermano sustituya esa figura masculina, con ello se evitará que crezcan con una personalidad distorsionada, rebelde, poco comunicativa o tiendan a confundir el papel que les corresponde desempeñar, añade Zamora.

Test

¿Conoce a su hijo o hija? Descubra si está delegando toda la responsabilidad de la crianza a la madre. Este test es sugerido por la sicóloga Suzzette del Valle.

  • ¿Sabe cuáles son las actividades que a su pequeño le gusta hacer?
  • ¿Qué música, comida, personaje o cuento prefiere?
  • ¿A qué le tiene terror o miedo?
  • ¿Cuál es la opinión que tiene de su maestro (a)?
  • ¿Conoce los nombres de sus amiguitos?
  • Si su hijo pudiera pedir tres deseos ¿cuáles expresaría?
  • Diga tres virtudes y tres defectos de su chiquillo.

ESCRITO POR:

ARCHIVADO EN: