Bailey-Cole, según el diario Jamaica Gleaner, ya tuvo problemas el pasado año al contraer el virus Chikungunya y lesionarse en la carrera de Londres donde obtuvo su récord personal en 100 metros (9.92).
El compañero de relevos de Usain Bolt no se arredra ante las enfermedades y asegura que está dispuesto a dar lo mejor de sí mismo para estar en los Juegos de Río, pese a los contratiempos.
“Sí, estoy un poco preocupado (por la preparación), pero rezo para tener la fuerza necesaria para ir superando rondas. No es fácil recuperarse porque todavía tengo erupciones en el cuerpo. Me duelen los ojos, pero lo bueno es que por el momento no siento ninguna molestia muscular”, declaró al periódico.
“No sabía que lo tenía (el virus Zika) hasta que fui a la peluquería y mi novia me vio un bulto en el cuello, que era un nódulo linfático. ya sé que tengo el virus y he estado entrenando con él desde hace tres días”, comentó el velocista, de 24 años.
Bailey-Cole, que se clasificó tercero el año pasado en las pruebas de selección de Jamaica, no pudo, sin embargo, competir en los Mundiales de Pekín debido a la lesión muscular que sufrió en la carrera de Londres.
La próxima semana tendrá que disputar una de las tres plazas olímpicas en 100 metros a atletas de la talla de Usain Bolt, Asafa Powell, Yohan Blake, Nickel Ashmeade y Jason Livermore.