Las imágenes que utiliza esta nueva versión fueron tomadas con las técnicas mejoradas de las que fue dotado ese satélite puesto en órbita en 2013 como parte de una colaboración entre la Nasa y el Servicio Geológico de Estados Unidos para hacer seguimiento a los cambios en la superficie terrestre.
Google Earth utilizaba hasta ahora imágenes suministradas por el satélite Landsat 7, que presentó un problema de hardware que dio lugar a imágenes interrumpidas con grandes franjas diagonales, según señala el gerente de programa, Chris Herwig.
Para solucionar ese inconveniente era necesario superponer varias fotografías de una misma región.
“Landsat 8 captura imágenes con mayor detalle, colores más reales y con una frecuencia sin precedentes”, aseguró Herwig en un blog.
Ahora Google Earth puede garantizar que crea una vista panorámica de la superficie del planeta mediante el análisis de millones de imágenes que son unidas seleccionando los fragmentos con los mejores pixeles que se pueden obtener, señala Herwing.
Landsat ha observado la Tierra desde el espacio desde 1972, reuniendo una gran cantidad de información sobre los cambios en la superficie de la Tierra a través del tiempo.